
El acto previsto para este sábado 11 de febrero organizado por el alcalde socialista de Vigo y presidente de la FEMP, Abel Caballero, con regidores socialistas de toda España en el Centro Deportivo y Cultural de la ONCE en Madrid ha despertado tensiones en el PSOE después de que los sectores críticos del partido hayan tachado al mismo de plataforma de apoyo a la presidenta andaluza, Susana Díaz.
Esta convocatoria de Caballero, uno de los destacados opositores a Pedro Sánchez en los estertores de su mandato como secretario general y después, ha levantado suspicacias internas al verse como un intento de aunar al poder municipal socialista en torno a la figura de una Díaz que, aunque aún no ha dado el salto a las primarias, en las últimas semanas ha intensificado sus actos por toda España para tantear el terreno y preparar el lanzamiento de su eventual candidatura.
Tanto revuelo ha causado este acto que la propia Gestora del PSOE, acusada por los críticos de actuar siempre en favor de Díaz, tuvo que desmarcarse ayer del mismo. Fue el portavoz del órgano, Mario Jiménez, quien explicó que no está previsto que ningún miembro de la dirección acuda al acto e insistió en que el partido está ahora en "un proceso interno" y, por tanto, "es normal que los militantes se reúnan, se sientan a discutir, a valorar, a debatir".
En una rueda de prensa en Ferraz, el 'número dos' de la Gestora detalló que no le consta que ninguno de sus compañeros en la dirección del partido vaya a acudir al evento que está organizando el alcalde de Vigo y rechazó que esto se pueda interpretar en el sentido de que la dirección considera a la presidenta de los andaluces candidata a las primarias del partido.
"No me consta que ningún miembro de la Gestora vaya a asistir a ese acto ni a ningún otro acto", fue su respuesta. Después, Jiménez evitó hacer valoraciones sobre esta decisión y quiso darle un carácter de normalidad al evento de este sábado, al que están invitados alcaldes y concejales de todo el país.
Por su parte, el aspirante a liderar el PSOE Patxi López advirtió también ayer de que si el sábado 11 se hace un acto del partido "para dar una respuesta al Congreso del PP o al de Podemos", la voz que se oiga en él debe ser "del PSOE, no una voz parcial para hacer proselitismo de una candidatura".
López se expresó así, en una entrevista en Cope, preguntado por el acto. Además, avisó contra los "cálculos antiguos" en relación con el papel de los "aparatos" porque cree que, después de los procesos de primarias que ya se han dado, la militancia del PSOE está lo suficientemente madura "como para no obedecer consignas" y decidir libremente lo que considere mejor para el conjunto del partido.
De hecho, recordó que él basa su candidatura precisamente en eso, en una militancia "harta de la división y el enfrentamiento interno" que quiere que el PSOE salga de ese bucle para empezar a hablar de lo que preocupa a los ciudadanos.
También ha indignado en el sector crítico, especialmente en la facción que apoya a Sánchez, las informaciones hechas públicas ayer por varios medios de que las federaciones aragonesa y valenciana del PSOE, con líderes proclives a Díaz, Javier Lambán y Ximo Puig, fletarán autobuses gratuitos con tal de lograr un gran aforo en el acto de Díaz.
Los precios de estos autobuses, entre los cero y los seis euros para los socialistas que quieran acudir al evento contrastan con los fletados para el acto que protagonizó Sánchez en Sevilla, en el que los militantes pagaron de su cuenta el autobús no siendo los viajes sufragados por las federaciones, como en este caso.
Uno de los destacados alcaldes socialistas, el crítico Óscar Puente, regidor de Valladolid, mostró ayer su rechazo a este acto y lo tildó de plataforma de promoción a Díaz: "No es un acto de alcaldes, sino de fans de una posible candidata a la que saben que no respaldo. No estoy invitado ni voy a ir".