El representante de ERC, Gabriel Rufián, protagonizó la intervención más controvertida en la sesión de investidura de Mariano Rajoy en el Congreso.
En sus cinco minutos, el catalán tuvo tiempo de arremeter contra el "PSOE Iscariote", pero especialmente contra Ciudadanos, al hablar de "Maese cuñado Rivera" o de "los cínicos naranjas y su escisión Forocoches".
La intervención fue reprochada por otros diputados en varias ocasiones y acabó siendo cortada por la presidenta del Congreso, Ana Pastor, al pasarse del tiempo estipulado.
