
El líder socialista, Pedro Sánchez, ha pedido hoy al de Podemos, Pablo Iglesias, que "si no es valiente" y "si no tiene coraje para sumarse al cambio" con él y con Albert Rivera, al menos "no lo bloquee", es decir que con su abstención permita un gobierno de minoría del PSOE y Ciudadanos.
"O bien participa del cambio o nos deja al resto formar ese gobierno del cambio", ha reclamado Sánchez en rueda de prensa tras la reunión de la Ejecutiva del PSOE y después de animar a Iglesias a que "sea valiente, dé un paso la frente y diga sí al cambio".
"Si no es valiente y no tiene ese coraje, al menos que nos deje liderar ese cambio a aquellos que hemos negociado y acordado durante este mes largo, que no lo bloquee", ha continuado el líder socialista en rueda de prensa tras la reunión de la comisión permanente de la ejecutiva de su partido.
Polémica con las alcaldías
Sánchez también ha negado que el PSOE vaya a dejar caer a alcaldes de Podemos que gobiernan con el apoyo o la abstención de los socialistas por la posición del líder de ese partido en las negociaciones de investidura del presidente del Gobierno, porque esas ciudades no son "responsables del sectarismo de Pablo Iglesias".
El líder socialista ha explicado que su partido apostó por el cambio en los gobiernos municipales de ciudades como Madrid, Zaragoza o Santiago de Compostela y que "es coherente" con lo que defendió entonces.
Ha asegurado que los socialistas van a "consolidar" esos nuevos equipos, aunque siempre desde una "oposición leal y exigente". "No vamos a desestabilizar ningún gobierno municipal que estemos apoyando desde la oposición", ha recalcado.
Son seis los denominados 'alcaldes del cambio' que llegaron al poder tras las elecciones municipales de mayo gracias a un acuerdo alcanzado con los grupos del PSOE, entre otras fuerzas. Y viceversa, al menos diez gobiernos municipales socialistas en capitales de provincia dependen de las denominadas 'marcas blancas' de Podemos que, con su apoyo o abstención, permitieron la investidura de un alcalde socialista.
Beso a Rajoy
Horas antes, en una entrevista concedida a Antena 3, Sánchez ha afirmado que Iglesias al final "tendrá que hacer de la necesidad virtud" y asumir que se necesita "a todas las fuerzas del cambio para conformar ese gobierno del cambio" y, por tanto, debe entenderse con Ciudadanos.
Sánchez indicó que "Iglesias, a quien besó fue a Rajoy, porque sigue siendo presidente", al cerrar con él una "coalición en negativo" e impedir que un candidato socialista sea investido jefe del Ejecutivo.
Aludía así al llamado "pacto del beso" que le ofreció Iglesias con el fin de que elija a Podemos para su acuerdo de Gobierno y abandone el que tiene firmado con Ciudadanos, que Sánchez defendió como base para cualquier acuerdo "transversal" con vistas a la conformación de un nuevo Gobierno.
Ojalá fuera Oltra
Ante la insiste petición de Iglesias de un gobierno "a la valenciana", en alusión al que cerraron PSOE, Compromís y Podemos en la Comunidad Valenciana, Sánchez respondió que hay diferencias entre el líder podemista y la coportavoz de Compromís, Mònica Oltra. "Ya me gustaría a mí que Iglesias fuera Oltra, en actitud y en apertura de miras", reflexionó.
Por todo ello, el líder del PSOE espera que Iglesias "recapacite" y abandone las "líneas rojas y los vetos", porque "Podemos es ahora mismo quien está haciendo la respiración asistida a Rajoy en el Gobierno".
"Lo único que espero del PP y de Podemos es que nos dejen gobernar a aquellos que hemos planteado una solución", remachó.
Sánchez reconoció que le "gustaría" tener "más" confianza con Iglesias, pero añadió que fue el líder podemista quien le conformó un gobierno mientras él estaba reunido con el jefe del Estado.
"Él y yo tenemos que entendernos, pero sobre la base de la confianza, y no puede ser que la plantee desde la desconfianza", agregó.
Por el contrario, destacó que con Albert Rivera ha encontrado el "territorio común" que les une, porque han dejado a un lado los intereses partidistas en beneficio de los generales, mientras que Iglesias opta por mantener como presidente en funciones a "la peor de las derechas".
No exige disculpas a Iglesias por González
Pedro Sánchez también ha manifestado que no le va a pedir a Pablo Iglesias que pida perdón por las "descalificaciones" que vertió sobre el expresidente del Gobierno Felipe González durante el pasado debate de investidura. "No voy a pedir que pida perdón" porque "cada uno se califica con lo que dice", expresó el líder socialista .
"Yo no se las voy a pedir", insistió Sánchez, para después añadir que "la política tiene que dejar a un lado los insultos y los sectarismos" y que a él lo llamó "miserable" durante el cara a cara parlamentario. "En muchas ocasiones, no entiendo de dónde saca tanto rencor y tanto odio con el PSOE", agregó.
Además, le ha trasladado un mensaje de tranquilidad a los alcaldes de formaciones próximas a Podemos que gobiernan gracias al apoyo del PSOE, porque no va a modificar esos acuerdos. "No peligran" las alcaldías de Podemos, aclaró el líder socialista. "No vamos a hacer pagar a los ciudadanos el sectarismo de Iglesias", agregó.
De esta manera, Sánchez quiso enviar el mensaje a los alcaldes de Madrid, Cádiz y Zaragoza, entre otros, de que "pueden estar tranquilos" porque el PSOE seguirá manteniéndose como una "oposición leal y exigente", pero "siempre apoyando" a esos ejecutivos locales que se formaron tras las pasadas elecciones municipales de mayo.
Agregó que ese apoyo lo dieron sin pedir "nada a cambio" y aseguró que no lo van a hacer ahora, porque él no es Iglesias.