
Carles Puigdemont ha prometido este martes el cargo de presidente de la Generalitat catalana después de que el pasado domingo saliera elegido en votación en el Parlament tras dar Artur Mas "un paso al lado" para desatascar las negociaciones entre Junts pel Sí y la CUP para formar gobierno. El dardo de Mas al Rey y Rajoy: "Yo sí que agradezco todos los servicios prestados".
Periodista con 10 años de experiencia en política desde que en 2006 se presentara con CiU al Parlament, Puigdemont ha sido desde 2007 y hasta ayer -cuando renunció al cargo- alcalde de Girona. "Venimos de lejos pero no estamos cansados y hoy tenemos esperanza, hoy más que nunca", ha dicho en la toma de posesión en un discurso en el que no ha hecho mención a la Constitución ni al Rey. Tampoco la ha hecho la presidenta del Parlament, Carme Forcadel, al plantear la pregunta de toma de posesión la que el nuevo presidente catalán ha contestado afirmativamente. "¿Promete cumplir lealmente las obligaciones del cargo de presidente de la Generalitat con fidelidad a la voluntad del pueblo de Cataluña representado por el Parlament?".
Condiciones dignas de trabajo, derechos mínimos garantizados, sanidad... "Todo esto no será posible sin las herramientas que nos permitan hacerlo", ha dicho Puigdemont sobre las apuestas del nuevo Gobierno, que ha advertido que no va a hacer de cualquier manera y ha prometido "fidelidad" al pueblo de Cataluña.
"Estamos ahogados, humillados financieramente". Se ha comprometido a estabilizar, tranquilizar, explicar e implicarse más y a más gente. Ha apostado por un debate "con el máximo respeto y la máxima tranquilidad".
"Presidente, gracias por haber aceptado", ha dicho en el acto el ya expresidente de la Generalitat, Artur Mas, al nuevo president, el 130 de la Generalitat.
La independencia como plan
El independentista Puigdemont asume desde hoy sus funciones como nuevo presidente de la Generalitat con la intención de convertir a Cataluña en una república independiente.
Será el inicio de una legislatura corta, de 18 meses según la hoja de ruta separatista, para avanzar apresuradamente hacia su separación de España. La legislatura "de la postautonomía y de la preindependencia" como la define el nuevo presidente, abiertamente republicano.
El nuevo Ejecutivo catalán estará formado por miembros de diferentes partidos independentistas de la coalición Junts pel Sí (CDC y ERC), ganadora de las elecciones de septiembre, con 62 diputados. La CUP obtuvo diez. La mayoría absoluta está en 68.
Su brazo derecho será Oriol Junqueras, líder de ERC. Controlará la vicepresidencia y el área económica, encargada de aplicar las medidas sociales prometidas a la CUP, como la prohibición de cortar el agua, la luz o el gas a familias pobres, frenar los desahucios o elevar progresivamente el salario mínimo.
Recibido entre aplausos
El nuevo presidente catalán llegó a las 18:00 a la Generalitat arropado por 300 personas al grito de 'president' cuando cruzaba la plaza Sant Jaume con su esposa, Marcela Topor, y flanqueado por 14 mossos d'Esquadra de gala encabezados por el comisario jefe, Josep Lluís Trapero.
Los concentrados -entre los que ha habido también turistas y curiosos- celebraban la llegada de Puigdemont con banderas independentistas, mientras un hombre hacía ondear una bandera española tras el grueso del público.
Puigdemont se encontró antes de la ceremonia con el ya expresidente Artur Mas, acompañado también por su esposa, Helena Rakosnik.