
La conocida afición del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, por ser omnipresente en televisión decrece. En las últimas semanas Iglesias ha decidido no asistir a varias cadenas a las que había sido invitado.
Se trata de tertulias y formatos de análisis político que desean contar con el líder de Podemos entre sus colaboradores para que participe en directo, e Iglesias ha declinado todas las propuestas.
La explicación oficial del partido es que su líder ya no ejerce sólo como secretario general del partido, sino que ante todo es el candidato de Podemos a La Moncloa, por lo que no puede sentarse en un plató de televisión con otros tertulianos o periodistas "de segunda fila".
Iglesias sólo aceptará entrevistas personales porque considera que está en fase de consolidación y porque, reconocen sus allegados, teme decir algo en las tertulias que pueda restarle popularidad en las encuestas.