
Mariano Rajoy arropará a la popular María Dolores de Cospedal en la campaña electoral que está a punto de dar su pistoletazo de salida el 24 de mayo, con tres actos repartidos en Talavera de la Reina, Cuenca y Guadalajara. Antes ya lo había hecho en Ciudad Real y recientemente en Toledo. Y lo hace, según fuentes populares, para marcar la raya entre un apoyo manifiesto a su secretaria general, y el distanciamiento con la vicepresidenta del Gobierno y los 'sorayos', tal y como se conocen a los acólitos de Santamaría.
Rajoy ha enviado un mensaje claro. Lo hizo el día que intervino en la Junta Directiva Nacional ante 600 dirigentes y miembros de su partido, momento en el que pidió "unidad", y sobre todo no enredarse en cosas que importan a 25".
El discurso, o parte de él, podía llevar implícito una mensaje encriptado dirigido a esas 25 personas. Hoy, el diario Público interpreta en sus palabras el hartazgo del presidente por las luchas internas, que "detesta", acrecentadas de la Semana Santa hasta la fecha.
Aquella mañana, si algo quedó claro fue la disposición del máximo líder de los populares. Rajoy se sentó junto a Cospedal, como viene siendo habitual en este tipo de reuniones, pero además hizo hincapié en su inquebrantable apoyo hacia la misma, de quien ponderó haber tenido que "lidiar con situaciones muy complejas y muy difíciles". Mensaje para navegantes, con Santamaría enfrente junto a Montoro y Alicia Sánchez-Camacho.
A los que no se presentan, los que no ganan...
Días atrás, quedaba constatada la defensa a María Dolores de Cospedal de los populares castellano-manchegos Agustín Conde y Carmen Riolobos. Ante los medios, Conde respaldó a su líder al tiempo que cuestionaba una sucesión de filtraciones (supuestamente del propio partido, y contrarias a la presidenta castellano-manchega) que acabarían haciendo "mal al PP". Por ello, reprobaba a los que "no dan la cara" y no se atrevían a desvelar sus nombres, aunque a su juicio, "a buen entendedor, basta".
La portavoz del PP castellano-manchego aludía en su caso a los que perdieron en Andalucía y se dedican a "desestabilizar el partido", dejando en evidencia a quienes "no se han presentado nunca" a unas elecciones y "no saben nada de política", así como a los que "no han ganado nunca", en clara alusión a Javier Arenas, Soraya Sáenz de Santamaría, entre otros dirigentes.
Lo cierto es que la dialéctica del PP de Castilla-La Mancha no ha frenado las filtraciones de los adversarios. En medio de esa atmósfera Conde ha remarcado que el PP de Castilla-La Mancha no está dispuesto "a que se le haga daño al PP sin alzar la voz y reclamar lealtad a los dirigentes". En este ambiente, y con motivo de un encuentro de ABC, Cospedal planteaba la posibilidad de marcharse de la Secretaría general del PP tras las elecciones autonómicas. La número dos de los populares admitía que "era una de las opciones". Subrayaba que era "una tarea muy dura", y como muestra de lealtad declaraba que "siempre está a disposición" de su partido.
El posicionamiento de Rajoy
Rajoy tuvo que ser contundente en la última Junta Directiva para ahuyentar las críticas y posicionarse al lado de su lugarteniente en el partido. Así lo interpretan en el PP, y así lo ha hecho saber en repetidas ocasiones. Rajoy cuenta con Cospedal, y en ningún momento ha contemplado la posibilidad de que Cospedal deje la Secretaría. La noticia coincide con el reciente análisis de Javier Ayuso en el diario El País, en el que éste reproduce un rumor creciente que circula en algunos ámbitos el PP: "Mariano Rajoy y Soraya no se hablan desde hace semanas".
Entre tanto, se suceden se las filtraciones. Para pocos pasa desapercibido que el día en el que Santamaría habló abiertamente de "amnistía fiscal" en el Congreso fue el mismo en el que apareció el lapsus linguae y el error geográfico que la secretaria general cometió en distintos actos.
Ahora, Rajoy viaja a Castilla-La Mancha con motivo de la campaña autonómica y municipal. De sus 15 intervenciones repartidas por toda España, el presidente ha elegido estará tres en la región de Cospedal. No en vano, Cospedal es una de las dirigentes populares que mejor tratan las encuestas. Los sondeos coinciden en darle la mayoría absoluta, lo que supondría revalidar su triunfo y consolidar su liderazgo en el seno del Partido Popular. Por cierto que Aznar, también arropará a la número dos del Partido Popular.