
El servicio de estudios BBVA Research considera que la economía vasca crecerá un 1,1% en el 2014 y un 1,8% en 2015, recuperación que califica como 'más tardía' que la media española debido al gran peso que supone la Eurozona (que está creciendo menos) en las exportaciones vascas. La variable del empleo será la que más cueste recuperar, ya que según el informe 'Situación País Vasco' hasta el año 2021 no se volverán a alcanzar las tasas de empleo previas a la crisis económica.
En 2007 la tasa de paro en Euskadi se limitaba al 5,73 por ciento, frente al 16,13% de junio pasado, según la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Esta recuperación del empleo previa a la crisis se producirá en Euskadi unos cuatro o cinco años antes que en el conjunto de España, que el horizonte temporal se prolonga al menos hasta 2025.
Para que se cumplan estas previsiones, el economista jefe de Economías Desarrolladas del BBVA Research, Rafael Doménech, explicó que serán necesarios crecimientos económicos anuales cercanos a un 2,5% y que se reproduzcan los niveles de incremento de productividad que se dieron en tras las crisis de los años 80 y 90 en el País Vasco. En este sentido el informe económico destaca que en Euskadi el incremento de la productividad está siendo mayor que en el resto de España.
Para afianzar la recuperación económica en el País Vasco BBVA Research considera que es necesario atraer inversiones exteriores en sectores de alto valor añadido; flexibilidad salarial acorde a la productividad de cada empresa; y una mayor competencia sectorial en que se reduzcan los márgenes empresariales.
Según explicó Doménech la flexibilidad salarial resulta determinante para la recuperación del empleo y que el incremento salarial debe estar vinculado al incremento de productividad. 'El debate sobre si es el momento de incrementar los salarios o no, no está bien planteado. Los importante es si los salarios se adaptan a las ganancias de productividad' y después recordó el 'error' que supuso en 2009 la revalorización salarial en España y después se destruyeron 750.000 empleos.
De cara a 2015, BBVA Research considera que la depreciación del euro frente al dólar beneficiará las exportaciones españolas y que las reformas fiscales planteadas tendrán un impacto positivo en el PIB de unas tres décimas.
Respecto a la posibilidad de que se abone parte de las pagas extras atrasadas de los funcionarios, Doménech indicó que se trata de una 'decisión de tipo político'.
Por lo que se refiere al crédito, los datos de BBVA Research indican que hay liquidez en el mercado, que hay una mayor fluidez para las inversiones productivas y que en algunos casos el coste de la financiación para las empresas está en niveles similares o menores que los de 2007.