
La trayectoria de Carlos Delclaux Zulueta ha quedado reconocida como 'Mejor Empresario Vasco' por la XXII edición de los premios de La Noche de la Empresa vasca de la Fundación Empresa Vasca y Sociedad. Asimismo también recibieron galardones las empresas Orona (premio Made in Euskadi), CIE Automotive (premio Innovación Empresarial) y Smurfit Kappa Nervión (premio Euskal Makila).
La celebración anual de los premios tuvo como escenario el Museo Guggenheim Bilbao y contó con la asistencia de más de 300 representantes del mundo económico e institucional que mostraron su reconocimiento a los galardonados.
Carlos Delclaux Zulueta (Bilbao, 1956) preside Vidrala desde junio de 2002, en la que sustituyó a su tío, Álvaro Delclaux, que se jubiló. Antes de asumir la presidencia de Vidrala, Carlos Delclaux, trabajó en BBVA, en que llegó a ser el director general de Privanza, la división de banca privada de BBVA.
Vidrala, hoy en día, emplea directamente casi 2.000 personas y factura más de 450 millones de euros, la mitad en los mercados exteriores. Además es una referencia bursátil que ha logrado 21 ejercicios de crecimiento ininterrumpido del dividendo.
La presidencia de Carlos Delclaux y su dedicación plena a la compañía arrancó con la irrupción del euro y el alineamiento de la economía con unos tipos de interés bajos. Así empezó una estrategia de crecimiento para acercarse a los clientes. En 2003, compraron la lusa Ricardo Gallo; en 2004, las plantas de Milán y Castellar del Vallés de la estadounidense Owens Illinois; y en 2007, La Manufacture du Verre en Bélgica. El grupo se adentró en el cierre de la década con una producción anual superior a un millón de toneladas.
Con la crisis, Delclaux y su equipo aplicó una política estricta de desendeudamiento que redujo su deuda de 257 a 160 millones en tres años (134 millones actualmente), volumen que representa menos del 50 por ciento de sus fondos propios, que en ese período pasaron de 252 a 340 millones de euros.
La apuesta por la eficiencia, por trabajar más los costes y acelerar la racionalización cumplió el objetivo, como reconoce Carlos Delclaux, de 'volver a ser los mejores, los más eficientes industrialmente como ya lo éramos en 2002. Con las expansiones ganas en muchos aspectos del negocio, pero pierdes en otros'.
'Made in Euskadi' para Orona
Orona S. Coop., cooperativa asociada a Corporación Mondragón, ha sido distinguida con el premio 'Made in euskadi'. Se constituyó en 1964, cuenta con unos 4.500 trabajadores y está a punto de conmemorar su 50 aniversario habiéndose convertido en el líder nacional del sector de elevación y en una referencia europea e internacional.
Tiene ascensores instalados en más de 100 países y cuenta con 25 filiales propias en países europeos -Francia (11), Reino Unido (8), Irlanda (3), Bélgica (2), Portugal (2), Holanda (1), Noruega (1) y Luxemburgo (1)- y este mismo año ha completado una operación estratégica, el salto a América con la compra de la empresa brasileña AMG Elevadores, una empresa que cuenta con 450 empleados. Actualmente más del 50 por ciento de la facturación de Orona procede de los mercados exteriores, porcentaje que se incrementará en los próximos años.
El objetivo de dicho despliegue internacional, a través de la compra de empresas locales de cada país, era reducir las fuertes oscilaciones en las ventas provocadas por los cambios de ciclo económico, por lo que en los años del boom español de la construcción Orona no se centró en el mercado nacional.
Innovación Empresarial: CIE Automotive
El galardón de Innovación Empresarial ha recaído en CIE Automotive, grupo que tiene 69 plantas productivas repartidas por todo el mundo, cuatro centros de I+D y una plantilla de 20.500 empleados.
CIE Automotive combina el trabajo de gestión con una apuesta intensiva en I+D y en sostenibilidad. En el primer caso consume el 2,2 por ciento de sus ventas anuales con un alineamiento claro con la política europea de Horizonte 2020. Sus programas tecnológicos abarcan desde el ecodiseño hasta el ahorro de costes, tanto en el ciclo de vida como en el uso de materiales alternativos; la eficiencia energética de las fábricas y las plantas inteligentes, en las que persigue crear nuevos diseños que aceleren los ciclos de innovación. Asimismo, en la sostenibilidad su apuesta busca la reducción de emisiones con la optimización del gasto de combustibles y aceites, la reducción del tamaño y peso de los componentes, el posicionamiento en el motor eléctrico o la mejora de los aislamientos acústicos y térmicos.
La 'Euskal Makila' de Smurfit Kappa Nervión
Smurfit Kappa Nervión se sustenta en la antigua Celulosas del Nervión, a principios de los años cincuenta del pasado siglo. En la crisis económica 1994, el grupo irlandés Smurfit adquirió Celulosas del Nervión junto a todas las fábricas de papel del Grupo Saint, que en 2005 pasó a denominarse Smurfit Kappa Nervión
La fábrica de Iurreta, con unas ventas anuales que superan los 125 millones, emplea a a 290 personas e indirectamente a más de 1.500 y que, en los últimos años, ha subcontratado entre empresas del entorno más del 60 por ciento de los equipos y trabajos de montaje desarrollados con los más de 50 millones de euros invertidos en sus instalaciones. Además, la fábrica produce unas 150.000 toneladas/año de papel, de las que exporta más del 80 por ciento, y genera 120.000 MWh de energía eléctrica. Para ello, requiere 590.000 metros cúbicos de madera de fibra larga y 100.000 toneladas de biomasa, en gran parte suministrada desde el País Vasco, lo que significa que procesa el equivalente a más del 50 por ciento de la explotación forestal de la CAPV, facilitando la ejecución de las entresacas de bosques, consideradas imprescindibles para reducir los riesgos de incendio y rentabilizar el negocio de los silvicultores, así como dando salida a los residuos generados en los aserraderos.