El Observatorio del Suicidio, que depende de la Fundación Española para la Prevención del Suicidio, ha publicado recientemente datos sobre suicidios referidos al año 2023. El Observatorio obtiene esos datos del INE, que los publicó en diciembre de 2024. Haré un breve resumen descriptivo de ellos.
En 2023 hubo en España 4.116 suicidios (11,3 suicidios al día), 3.044 varones (el 74 %) y 1.072 mujeres (el 26 %). El número de mujeres suicidas es mucho más bajo que el de varones (en 2023 2,84 suicidios de varones por cada 1 de mujeres). El año anterior, 2022, hubo 4.227 suicidios, de los cuales 1.101 fueron mujeres. El método más utilizado por los suicidas, tanto varones como mujeres, es el ahorcamiento o estrangulamiento.
El mayor número de suicidios, tanto en varones como en mujeres, se dio en el tramo de edad 50-59 años. Pero las tasas de suicidios por 100.000 habitantes se disparan a partir de los 70 años. El 17,0 por 100.000 en los varones entre 70-79 años, 5,69 en las mujeres de esas edades. Para los varones de 80 años y más pasa al 34,54 por 100.000 y para las mujeres es el 5,81.
La tasa más alta de suicidios por 100.000 habitantes en 2023 se produjo en Asturias (13,9), seguida por la de Galicia (11,4) y la de Canarias (10,8). La más baja se observó en Madrid (6,0).
En 2023 el número de suicidios de varones por cada suicidio de mujeres fue 6,3 en Castilla-La Mancha, 3,7 en Galicia, 3,6 en Extremadura, 3,4 en Andalucía. La más baja se observó en La Rioja (1,5).
Siendo como es un grave problema, el suicido en España es menor que en otros países, como Corea (24,1 por 100.000 habitantes), Lituania (18,5), Eslovenia (15,7), Japón (15,4) o Bélgica (15,2).
Tras la publicación de estos datos y para explicar la diferencia entre varones y mujeres, el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, publicó en Infolibre un artículo donde se atribuían esas diferencias "a la masculinidad" que "empuja a asumir riesgos". Por otro lado, según un tuit del departamento de Mónica García, "la masculinidad" también es la causa por la cual los hombres viven menos (80,3 años hombres, 85,8 mujeres) y consumen más drogas.
Estas afirmaciones han provocado la indignación del sector, que no da crédito a esta simplificación y politización por parte de la máxima autoridad sanitaria. Y es que el departamento de Mónica García descarta cualquier componente genético o causa psicológica, cultural, económica o social, y se olvida además que, pese a que las tasas de suicidio son más altas en hombres, las mujeres presentan cifras más elevadas de intentos de suicidio (66%).
Pero lo más extravagante es asegurar que la diferencia en la esperanza de vida a favor de las mujeres se debe a esa tara inventada que el Ministerio llama masculinidad, cuando está más que demostrado que la componente que hoy explica la mayor parte de esas diferencias en la mortalidad no es otra que la biología. Y es que, aunque estos progres se empeñen en negar su existencia, la biología de los varones no es igual a la de las mujeres, lo cual se detecta a simple vista. Pero ya se sabe: para estos ideólogos la realidad no existe.