Opinión

¿Cuánto vale la Universidad para la economía?

Las universidades en su origen llevan a cabo toda una revolución en la que jóvenes se unían a profesores con el fin de adquirir conocimientos y generar oportunidades. El conocimiento siempre ha sido el camino hacia sociedades más ricas.

El estudio 'El impacto económico de las universidades: evidencia en todo el mundo', de World Economic Forum, evaluó universidades en 1.500 regiones de 78 países desde 1950 y es uno de los pocos que muestra explícitamente el vínculo entre la prevalencia de las universidades y la salud económica. En este estudio se muestran pruebas sólidas de que el aumento de la presencia universitaria se asocia con un crecimiento económico posterior más rápido. Concretamente, el estudio refleja que duplicar el número de universidades se asocia con un aumento del 4% del PIB per cápita en una región.

Las universidades han influido en el desarrollo de las sociedades a través del ejercicio de tres funciones: la docencia cumpliendo su misión de formador; la investigación encargada de generar nuevos conocimientos y, por último, las innovaciones que generan, contribuyendo a la mejora económica y social. Para que este conocimiento se catalice a la sociedad en forma de riqueza es necesaria una universidad porosa y abierta a las empresas, a las instituciones y a la sociedad en general; es decir, el concepto de cuádruple hélice que hace alusión a la relación entre universidades, empresas, instituciones y personas como el contexto idóneo en el que generar las conexiones más innovadoras que generan una mayor riqueza.

Los dos grandes ejemplos conocidos mundialmente son el entorno universitario de California y la posterior creación de Silicon Valley y el conocido como Silicon Wadi de Tel Aviv. Ambos comparten principios y también cuentan con numerosas diferencias, pero fundamentalmente se debe tener en cuenta que en ambos casos las inversiones procedentes tanto de fondos públicos como privados alejan cualquiera de estos dos ejemplos de las dimensiones de la universidad española. Sólo la Universidad de California (UC) declaró al finalizar el año fiscal 2022-2023 una cartera de inversión de 164 mil millones de dólares. Además, la propia UC estimaba hace unos años que por cada dólar que se invertía en la universidad, ésta repercutía a la economía general casi casi 14 dólares.

Por otro lado, la GUNi, red mundial de instituciones universitarias que promueven la UNESCO, tiene también como línea prioritaria de actuación la contribución de las universidades al desarrollo social, cultural y económico. Y lo que muchas veces me pregunto es: si todos tenemos clara la relación directa que existe entre el éxito económico y empresarial, el bienestar social y las universidades, ¿por qué la educación no es un tema considerado de Estado entre los principales partidos políticos? ¿Por qué la inversión en I+D+i de nuestro país está a la cola de nuestros vecinos europeos?

Con datos tan claros, hagamos examen de conciencia los cuatro ejes de la hélice y reflexionemos juntos. Como universidad, debemos pensar en cómo acercarnos más y mejor a las empresas y ofrecer programas de investigación interesantes, poner a su disposición nuestro joven talento capaz de innovar en sus modelos de negocio. También reflexionemos sobre cómo acercarnos a las instituciones públicas, mostrándoles nuestra valía para la economía y para la sociedad, solicitándoles una mayor inversión para la mejora de programas de investigación y mejorar nuestras capacidades docentes y que a todos los niveles administrativos se pueda legislar para premiar la creación de empresas en el ámbito universitario y la colaboración de las empresas con la Universidad. Y, por último, acercarnos a la sociedad en general y a las personas, abrirnos para que cualquier persona con interés en el saber venga a la Universidad porque para seguir el ritmo de la vida y de las innovaciones debemos recurrir a una formación permanente.

Desde aquí, hago un llamamiento al resto de los ejes de esa hélice para que reflexionen sobre cómo acercarse a las Universidades, cómo acrecentar la colaboración y cómo podemos trabajar para crear una sociedad rica.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky