Opinión

Sin solución a corto plazo para Talgo

El análisis de las cuentas de Talgo delata hasta qué punto la empresa española es la víctima principal del veto del Gobierno a la opa lanzada por Magyar Vagon. Una vez imposibilitada la entrada del consorcio húngaro, Talgo se enfrenta en solitario a vencimientos de deuda por valor de 105 millones este mes.

La obligación de cumplir con sus acreedores llega precisamente en un momento en que un aspecto clave para todo fabricante ferroviario, la tesorería, arrastra importantes tensiones, con unas necesidades de liquidez que crecen más del 60%. Es una situación de gran complejidad, a la que suma la ya crónica falta de capacidad de Talgo para atender pedidos para la que, tras el veto del Gobierno, no es posible encontrar solución con la rapidez que la empresa requiere.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky