
El Ayuntamiento de Madrid pondrá en marcha una fórmula novedosa de colaboración público privada en el mercado del alquiler. Hasta ahora, el consistorio apostaba por el formato de cesión de suelo a las promotoras para que construyeran vivienda de alquiler asequible por un periodo de 50 años, pasado ese tiempo, dichos terrenos volvían a ser de titularidad pública. Ahora, el ayuntamiento madrileño pondrá en el mercado una cartera de suelo público con el mismo propósito, pero los terrenos serán definitivamente de las empresas una vez pasados 15 años. Es evidente que con este cambio, se pretende incentivar la adquisición de suelo público para impulsar la construcción de pisos asequibles y accesibles a la población. Supone una adecuada iniciativa en un momento en el que la tensión de los precios está en máximos por una escasa oferta que es incapaz de satisfacer la demanda.