
Creo que no hay un solo economista que no haya aceptado el "mantra" de que vamos camino de una nueva era de alta inflación. Y yo, siento decirlo, tengo ciertas dudas al respecto. Creo que simplemente revertimos a la media.
Cierto, me baso en un cálculo nada espectacular y un tanto anticuado, pero que creo que sigue vigente en matemáticas y estadística: la media aritmética. Porque, a lo mejor, resulta que lo que está ocurriendo es simplemente que estamos volviendo a la media aritmética de inflación de los últimos 25 años.
Nos escandalizamos por tener una inflación en el entorno del 3 %, porque venimos de una década en la que se ha movido en el 2 % y la llegado a ser incluso negativa. Pero si tomamos perspectiva y observamos los datos desde que España forma parte del euro, la media está incluso por encima del 3 %. Y eso que incluye el periodo desinflacionista 2016-2021, un caso de inflación extraordinariamente baja consecuencia de dos situaciones excepcionales: el estancamiento económico europeo - conocido como "euro esclerosis" - y la pandemia, ambos muy desinflaciónistas. Y si nos vamos a periodos más largos, por ejemplo los últimos 50 años, un 3 % nos parecería un auténtico "chollo".
Alguien argumentará que, aunque ahora la inflación vuelva al 3 %, nadie nos quita el "subidón" de los últimos dos años. Efectivamente, así es, pero si ese "subidón" lo integramos en la serie histórica, que a efectos de homogeneidad establecemos en 1999 (cuando se inició el euro), el "subidón" se diluye.
Dicho de otra manera: que la inflación haya subido tanto recientemente lo único que hace es equilibrar que haya sido muy baja - o incluso negativa - en los 10 años anteriores.
Alguien dirá que los factores que permitieron que la inflación se mantuviera baja en los últimos 10 años han desaparecido. Siento disentir: estoy de acuerdo en que ya no son tan fuertes, pero creo que siguen ahí.
El primero y fundamental es la revolución digital. Nadie pone en duda que ha sido un factor desinflacionista (que viene de "desinflar" una inflación positiva, que no es lo mismo que "deflacionista", que es inflación negativa). Pues bien, podremos discutir cuál es la magnitud de la nueva fase de la revolución digital - que no es otra que el advenimiento de la inteligencia artificial generativa - pero sin duda es una nueva fase (en mi opinión las anteriores fueron Silicon Valley, Internet, el iPhone y, ahora, la IA generativa).
Las fases anteriores de la revolución digital desinflaron los precios a base de incrementar la competencia y aumentar la productividad y si algo va a hacer la implantación de la IA generativa, es precisamente eso. Según varios estudios bien fundamentados, en el que destacaría el de McKinsey, el incremento de productividad de la economía en los próximos años por aplicación de la IA generativa se moverá entre el 30 % y el 40 %, lo cual es una barbaridad. Y el incremento de la productividad afecta directamente a la moderación de la inflación.
Se argumentará que la inflación también ha bajado por la moderación en los precios de la energía y que eso se ha acabado. Pero resulta que el petróleo está actualmente en 81 dólares por barril, lo cual tampoco está muy lejos de la media de los últimos 15 años, periodo en el que la inflación ha sido moderada.
Además no olvidemos que ese precio de 81 dólares por barril del petróleo Brent coincide con una época en la que se está sancionando a uno de los mayores productores (Rusia) y tenemos un conflicto en Oriente medio. Es cierto que Rusia se ha saltado las sanciones a la torera, pero cuando algún día se levanten y teniendo en cuenta que Rusia necesitará mucho dinero, va a bombear petróleo como si no hubiera un mañana.
Finalmente, la globalización. Es cierto que se ha visto afectada en el discurso político, pero no parece que compremos menos a los chinos. Los norteamericanos sí, pero se lo están comprando a otros países emergentes, especialmente a México, con lo cual simplemente han cambiado los proveedores, no la estructura del comercio mundial.
Es muy probable que la globalización se vea afectada, pero yo no estoy diciendo que volvamos a inflación del 1%, estoy diciendo que estamos revirtiendo a la media.
¿Y los bancos centrales? Pues mantendrán los tipos de interés acordes a la media de periodos en los que la inflación era del 3 %, lo cual no es ninguna tragedia. Que se mantengan donde están ahora mismo o ligeramente por debajo no ha impedido nunca que haya crecimiento económico o que ganen dinero las empresas. Ha ocurrido incluso con tipos más altos.