
Andalucía se encuentra a la cabeza de siniestralidad laboral de autónomos. Es una estadística que no nos gustaría encabezar, pero la realidad es que durante 2022 nuestra comunidad autónoma, junto a Castilla y León, registró el mayor número de muertes laborales de autónomos por accidente de trabajo, con 12 fallecimientos.
Y no solo hemos liderado el número de muertes en accidente laboral de autónomos en 2022, sino que nuestra comunidad autónoma ha sido también la que más accidentes laborales, tanto en jornada laboral como in itinere, ha registrado durante el año pasado, con un total de 6.595 accidentes con baja. No obstante, y pese a la magnitud de la cifra, está lejos de los más de 80.000 accidentes laborales de asalariados registrados en nuestra región.
Los datos son espeluznantes y nos invitan a ponernos manos a la obra, porque no puede ser que a nadie le cueste la vida trabajar, independientemente de que sean autónomos o no. Para ATA, estos datos de siniestralidad son totalmente inasumibles.
Acción
Por eso, nos en las próximas semanas nos vamos a poner manos a la obra junto al Instituto Andaluz de Prevención de Riesgos Laborales para realizar acciones de asistencia técnica e información en materia de prevención de riesgos laborales y fomento de la cultura preventiva para personas trabajadoras autónomas. Hasta el momento, las políticas preventivas que las administraciones desarrollaban para los autónomos eran escasas, o directamente nulas, lo que se traducía en un incremento de los accidentes laborales.
La construcción, la reparación de vehículos de motor, la industria manufacturera, la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca; los servicios administrativos y servicios auxiliares, la hostelería o las actividades sanitarias y de servicios sociales han sido las actividades que han registrado un mayor número de accidentes laborales durante la jornada laboral en el último año en Andalucía.
Pero no solo en Andalucía, en el resto de España, en 2022, los autónomos registraron 35.140 accidentes de trabajo, tanto en jornada de trabajo como in itinere, de los cuales 79 resultaron mortales, 740 graves y 34.321 leves.
Causas
El cansancio, como consecuencia de las horas de trabajo que le dedican los autónomos a su negocio, influye negativamente en su seguridad. Es necesario apostar por la formación, por la asistencia técnica y por planes de prevención que pongan su foco en las necesidades reales y específicas del colectivo y no en ayudas genéricas que no ayuden de forma efectiva a la reducción de accidentes laborales de autónomos.
El autónomo en muchos sentidos es autodidacta y necesita saber que el bien más importante de su negocio es su vida. Por lo tanto, es necesario un mayor esfuerzo de todos para formar e informar a los autónomos con el fin de que se implante una cultura preventiva que nos proteja ante los riesgos laborales.