Opinión

Momento óptimo para la renta fija

El primer síntoma de control de los precios en EEUU hizo que los inversores se lanzasen a comprar bonos, lo que ha impulsado su precio y reducido su rentabilidad. En concreto, la renta fija recupera un 4,7% en noviembre.

 Porcentaje que convierte al pasado mes en el más alcista desde Lehman y el tercero de la historia para este mercado. Con todo, lo más importante es que, tras una década de rendimientos bajos o nulos, los tipos de interés y las primas de riesgo de los bonos vuelven a resultar atractivos. No en vano la rentabilidad de una cartera diversificada de renta fija a nivel global alcanza el 3,6% frente al 1,31% de inicios de año. Unas ganancias que permiten a la deuda convertirse en una alternativa al dinero en liquidez y a las bolsas.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky