
Dicen que la decisión de Pedro Sánchez de apostar por su ministro de Exteriores Josep Borrell como candidato a la Comisión Europea trastocó los planes de otros miembros del Ejecutivo. En concreto de Nadia Calviño cuyo objetivo es continuar en el Gobierno como paso previo para ocupar un alto cargo en Bruselas.
De ahí que algunos estén vean su nombramiento como presidenta de la Junta de Gobernadores del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD) como una estrategia de la propia Calviño para ganar peso ante el peligro que para su ministerio podría suponer el ascenso de María Jesús Montero a una vicepresidencia económica. "Para ocupar ese puesto en Europa es necesario ser ministra de Economía. Esta vinculación explica las intensas gestiones que Calviño ha realizado para acceder al cargo en el BERD", dicen en ambientes políticos. No obstante, la duración de dicho puesto es de solo un año, lo que avala a todos aquellos que aseguran que el futuro de Calviño pasa inexorablemente por Bruselas a medio plazo. "El tiempo que pase en Economía y en el BERD será suficiente para que Calviño defienda su gestión y sus relación con la UE ante Sánchez", dicen.