En octubre comienzan los habituales cursos de inglés en el Complejo de La Moncloa. A ellos están llamados no solo los altos cargos de Presidencia del Gobierno y también del Ministerio de Presidencia que dirige Carmen Calvo y que se ubica en el mismo lugar donde reside Pedro Sánchez.
También pueden apuntarse los funcionarios de Palacio. Todos, menos el propio Sánchez, que ya dispone de los conocimientos necesarios en este aspecto.
Según se comenta, tras su llegada se le ha dado una importancia mayor que en la época de Mariano Rajoy a la formación en el idioma de Shakespeare.Buena muestra de ello es que el presupuesto para estos cursos ha pasado de poco más de 13.000 euros en 2017 a cerca de 23.000 euros solo un año después.
"Esta empeñado en que todos hablemos inglés", dicen desde Moncloa. Las mismas fuentes indican que el objetivo que busca Sánchez, al pretender que se mejore la formación en este sentido, es el de que todo el personal del complejo esté preparado para ser competitivo en su trabajo con las miras puestas en las relaciones internacionales.
"No se trata solo de modernizar la Administración. El presidente quiere que todos seamos capaces de atender cualquier comunicación que venga del exterior", indica un funcionario.
