Es bien conocido que el exministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, convirtió Gibraltar en casi una causa personal. De ahí sus enfrentamientos con el ministro principal del Peñón, Fabian Picardo. Pues bien, desde el departamento ahora comandado por Alfonso Dastis se comenta que España ha puesto fin a la estrategia de mano dura que Margallo empleó.
"Queda demostrado que la agresividad y los enfrentamientos no funcionan y que los avances solo pueden venir a base de lentas negociaciones en las que todos cedamos", dicen desde el entorno del ministro de Exteriores. Las mismas fuentes añaden que, además, el Brexit no constituye un escenario en el que sea inteligente aumentar las presiones sobre Londres. Y por si fuera poco, el firme apoyo de Reino Unido a España en la cuestión catalana también ha influido para que España abandone la confrontación n el tema de Gibraltar.