En estos 10 años, la década que hoy festeja con notable éxito elEconomista, España se ha transformado de manera muy relevante en diferentes ámbitos. Esta transformación ha sido especialmente destacable en un aspecto que afecta al conjunto de la sociedad: me refiero a la digitalización. Gracias a la digitalización, el desarrollo social va a ser exponencial con una creación de riqueza sin precedentes. De hecho, una quinta parte del crecimiento global de los últimos veinte años se debe a la industria digital y si se incrementara en un 10 por ciento la digitalización de la economía, los ratios de crecimiento del PIB per cápita aumentarían en torno al 40 por ciento. Consulte el especial 10º Aniversario de elEconomista.es
Estamos siendo testigos de la mayor revolución tecnológica vivida hasta la fecha. Ningún sector ha permanecido inmune a esta realidad; de hecho, la prensa, los medios de comunicación, agentes cada vez más fundamentales para acercar la realidad a los ciudadanos, hoy en día son muy diferentes a los de hace una década. En un entorno global, sólo van a ser competitivas las industrias que estén digitalizadas y hagan evolucionar su modelo productivo.
Estamos a las puertas de una nueva y aún más avanzada era de innovación. Es la era de la economía digital, fruto de la convergencia de la digitalización con el Big Data y va a tener repercusiones que hoy no somos capaces de imaginar. El análisis del ingente volumen de datos que se generan, permite establecer patrones de comportamiento y modelos predictivos que van a ser claves para innovar.
La innovación es el progreso y es fundamental para ser competitivos. De hecho, existe una clara correlación entre los países más innovadores y su capacidad para generar riqueza y empleo. Esto se traduce en calidad de vida, una educación más accesible, un sistema de sanidad más moderno, una Administración más cercana. En definitiva, una vida más digital.
Telefónica recibe con los brazos abiertos esta nueva realidad, porque hemos entendido y de forma clara, que la vida digital es la vida. Además, nuestra compañía lleva la innovación en el ADN, y por eso hemos liderado todas las revoluciones tecnológicas en España en el último siglo.
Nuestras redes de ultra banda ancha nos permitirán abordar el crecimiento de tráfico de datos más impresionante de la historia, que se multiplicará por 11 de aquí a 2018, en un ecosistema en el que ya no se conectará a las personas, se conectará a las cosas: electrodomésticos, vehículos, maquinaria, la ropa o los complementos. Y el 99 por ciento de esas cosas, aún no están conectadas. El escenario es desafiante.
Necesitamos trabajar conjuntamente para capturar todo el potencial de la economía digital, la digitalización es una oportunidad histórica que ninguna economía debería perder para impulsar su crecimiento y mejorar los niveles de bienestar de todos sus ciudadanos.