El consejero delegado de JP Morgan, Jamie Dimon, no está muy de acuerdo con la decisión que han tomado sus accionistas sobre el bonus de 2014 para altos ejecutivos. A principios de mayo, las asesorías Glass Lewis e ISS recomendaron a los partícipes votar contra el plan de pago de la cúpula del banco de inversión. El consejo fue adoptado por el 40% de los accionistas la semana pasada, lo que enojó a Dimon hasta el punto de tildarlos de "vagos", incapaces de reconocer el "duro trabajo" que le hizo merecedor de ese bonus.