El artículo de opinión del nuevo directo de El Mundo, David Jiménez, este fin de semana causó una honda impresión. Pero no por la profundidad de sus razonamientos, sino por la ignorancia que destila cuando culpa a la prensa de la crisis de las cajas de ahorro y de la monarquía. Jiménez ha pasado demasiados años lejos de España, como él mismo reconoce en su escrito, y se nota que no siguió de cerca las informaciones de los diarios españoles, porque el problema de la politización de las cajas fue denunciado por elEconomista, entre otros medios, otra cosa es que los políticos no hicieran caso.
En cuanto a la monarquía, fue la prensa quien destapó las irregularidades. Las críticas a "los herederos de la Transición" tienen el mismo tono ideológico del ideólogo de Podemos, Pablo Iglesias. Mal empezamos si Jiménez quiere erigirse en el salvador de la patria. La prensa, querido amigo, es de las pocas instituciones que aún funciona.
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