THE GUARDIAN (REINO UNIDO)
El sector de la alimentación de Reino Unido tienen problemas. Tras nueve años de crecimiento de las ventas, la situación se encuentra en un punto muerto. Y no se trata de una pequeña caída, si no que de acuerdo con el analista David McCarthy, de HSBC: "el sector está en declive estructural, sin un final a la vista". Las cadenas de supermercados británicas han prosperado gracias a tres mitos: que son baratas, que tienen productos adecuados y que ofrecen una elección de calidad. Sin embargo, estas creencias han sido desbancadas por tiendas alemanas como Aldi o Lidl, que ofrecen también productos de calidad a precios más bajos. El sector de la alimentación británico debe ahora buscar una estrategia oportuna para no perder más volumen de negocio.