La Generalitat y las diputaciones provinciales pusieron en marcha ayer el embrión de la agencia tributaria catalana, bajo el nombre de Tributs de Catalunya. Un organismo innecesario que hará más difícil la lucha contra el fraude.
La Generalitat y las diputaciones provinciales pusieron en marcha ayer el embrión de la agencia tributaria catalana, bajo el nombre de Tributs de Catalunya. Un organismo innecesario que hará más difícil la lucha contra el fraude.