Después de tres años sin retribuir al accionariado como consecuencia del endeudamiento, la compañía vuelve a dar dividendos, pese a la compra de la filial de Novartis, lo que demuestra que la estrategia de la compañía funciona.
Después de tres años sin retribuir al accionariado como consecuencia del endeudamiento, la compañía vuelve a dar dividendos, pese a la compra de la filial de Novartis, lo que demuestra que la estrategia de la compañía funciona.