La fotovoltaica vive su peor crisis desde que se declaró en concurso de acreedores. Acumula en los últimos dos años 120 millones de pérdidas y está afrontando su segundo ERE. Sólo una oferta de compra le permitiría continuar.
La fotovoltaica vive su peor crisis desde que se declaró en concurso de acreedores. Acumula en los últimos dos años 120 millones de pérdidas y está afrontando su segundo ERE. Sólo una oferta de compra le permitiría continuar.