Pese a que su beneficio se resintió en 2012, la buena marcha de Telefónica y su compromiso de pagar un dividendo de 0,75 euros han propiciado que cuatro firmas, entre ellas J. P. Morgan, hayan elevado su consejo sobre la operadora.
Pese a que su beneficio se resintió en 2012, la buena marcha de Telefónica y su compromiso de pagar un dividendo de 0,75 euros han propiciado que cuatro firmas, entre ellas J. P. Morgan, hayan elevado su consejo sobre la operadora.