
Cuesta encontrar un motivo fuera de los índices de EEUU para no pensar que estamos a las puertas de una corrección.
En estos días la pregunta que uno se hace continuamente es... ¿Qué va a pasar si corrige Wall Street? Y es que ya hace dos semanas que, al tiempo que el mercado norteamericano sigue ganando altura, crecen a su alrededor amenazas relacionadas con la calidad y cantidad de los apoyos con que cuenta el alza. Y en este momento, salvo por una volatilidad que ha vuelto al mínimo del año y no presenta, por tanto, divergencia alguna, cuesta encontrar un motivo fuera de la inercia de los índices norteamericanos para no pensar que estamos a las puertas de una corrección.
Una corrección que, como ya puede imaginar si va siguiendo estas tribunas, tiene la excusa perfecta en forma de resistencias, tanto en el corto plazo -sobre todo con un Nasdaq Composite en los altos de 2012 en medio de una manifiesta falta de apoyo por parte del Nasdaq 100-, como en el medio y largo plazo. Y es que el S&P500 total return transita en las inmediaciones de una resistencia creciente que une los máximos de 2000 y 2007, alentado por ruptura en otros índices, pero aún lejos de despejar la situación por sí mismo.
Y si hace semanas le comentaba que uno no está para ser el primero en salirse de una tendencia cuando se alcanza una zona de techo potencial, incluso siendo de este calibre -son cosas que no se ven muchas veces en la vida-, hoy tengo que insistir en que quizá hay que estar listo para sacar el acordeón y empezar a comprimirlo para bajar la exposición. Nosotros lo hemos hecho vendiendo parte de renta variable española esta semana, en plena resistencia, sin esperar a un deterioro técnico. Por supuesto, asumimos sin problemas el cierre de posiciones si salta un stop. No está para filtros un mercado que ve cómo Europa es incapaz de rebotar con energía pese al varapalo que ha recibido en febrero, donde los emergentes han sembrado muchas dudas, y donde Japón merece una corrección aunque sólo sea porque lo recuperado es una barbaridad en tan poco tiempo. Ojo a los 3.165 del Nasdaq Compuesto y al soporte decreciente del Dax 30.