Opinión

Un gasto que impide impulsar el empleo

Los salarios públicos han crecido un 10,5% acumulado en los dos últimos años. Uno de los aspectos más llamativos de esta evolución es que 2021 recoge el fin de los contratos temporales realizados en Sanidad y Educación para hacer frente al impacto de la pandemia.

Con ello queda de manifiesto que el incremento de la masa salarial no deriva de la crisis sanitaria, como defiende el Gobierno, sino de un aumento estructural del número de los funcionarios, que además incorporan a estos nuevos asalariados en puestos de menor productividad. Así se mejoran las estadísticas laborales, pero a costa de disparar el gasto público mientras se detrae al sector privado del talento que necesita para impulsar una verdadera recuperación del empleo.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky