
Pedro Sánchez, 'solo' ante Marruecos
La reunión de Pedro Sánchez y el rey de Marruecos, Mohamed VI, pone fin a una larga etapa de tensiones diplomáticas por el Sáhara, pero abre otra nueva por exactamente el mismo motivo. El enfado de Argelia, el rechazo de los grupos parlamentarios, empezando por sus socios de Gobierno, a su giro en política exterior no se resuelven con una foto con el monarca del país vecino. Y la inquietud alcanza a los ministerios socialistas, que estos días han comentado que se sienten completamente al margen de las decisiones de Pedro Sánchez. "Él decide y él actúa", comentan. De hecho, algunos dicen que el encuentro con Mohamed VI se fraguó "sin la participación" del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, y que el presidente recurrió a una figura como José Luis Rodríguez Zapatero. En el departamento de Albares, que acompañó al presidente en el histórico encuentro, niegan la mayor, aunque no dan más detalles de la negociación por "la más elemental prudencia". Aun así, la medalla se la pone el jefe del Ejecutivo.
Unai Sordo, ¿en el punto de mira de Yolanda Díaz?
No son pocas las voces que en los últimos meses se lanzan a afirmar, con cada vez mayor contundencia, que Yolanda Díaz quiere fichar al secretario general de CCOO, Unai Sordo, para su proyecto político. Algunos lo dan por hecho ante la sintonía entre las tesis de la ministra y las del líder sindical, que se ha convertido en su gran valedor incluso en algunas reuniones de la Mesa del Diálogo Social. Aunque en fuentes del sindicato restan pábulo a esos rumores. Ni confirman ni desmienten, pero hay quien apunta que en CCOO tienen claros los malos precedentes de pasar de sus filas a la política, como cuando Joaquín Nieto aterrizó en las listas de Gaspar Llamazares. Achacan estas noticias más bien a los nervios en el seno de la propia Unidas Podemos por el "baile de sillas" en las listas electorales.
Díaz Ayuso y la política 'shakesperiana'
Estamos tan acostumbrados a los destrozos que la clase política española le ha hecho al idioma inglés, que se convierte en noticia cuando lo contrario se produce. Este ha sido el caso de Isabel Díaz Ayuso, cuyo dominio de la lengua de Shakespeare se ha convertido en la comidilla incluso en redes sociales. Pese a que la presidenta madrileña no es en absoluto una excepción, la ciudadanía lo sigue considerando una rareza, teniendo en cuenta los precedentes. "Siempre es mejor poder reírse de nosotros", comenta una exdiputada totalmente bilingüe.