
elEconomista brindó su homenaje a todos los ámbitos (Policía, Ejército, empresas de servicios básicos, logística...) que mantuvieron su actividad a pleno rendimiento durante los peores momentos del confinamiento.
La enumeración misma de estos colectivos revela la importancia que revistió la colaboración entre los sectores público y privado; se trata de unas valiosas sinergias que urge conservar y fomentar. Pero es necesario también aprender de las deficiencias que la epidemia delató, como la necesidad de invertir en mayor medida en el alto potencial científico e investigador que España atesora precisamente en ámbitos como el sanitario. Conviene que no se olviden las lecciones que transmiten quienes supieron comportarse como héroes en medio de una crisis histórica.