
Los resultados relativos al pasado trimestre que la banca española publica confirman su tendencia positiva, hasta el punto de que permiten revisar al alza las expectativas para todo 2021.
Ahora es posible llegar a los 15.000 millones de beneficio, un 60% más de lo previsto a finales del año pasado. Sin duda, debe aislarse el efecto del beneficio récord previsto en CaixaBank por un efecto contable derivado de la absorción de Bankia. Sin embargo, deben valorarse los vientos de cola que soplan para el sector por el avance del negocio hipotecario y la contención de la morosidad. Con todo, sería imprudente dar terminada la crisis en el ámbito financiero. Conviene prestar atención a los supervisores cuando avisan de que aún son necesarias las provisiones ante un posible repunte de impagos.