Tras una semana de lucha, el Ibex logró rebasar la resistencia clave de los 9.400 puntos. Técnicamente, el camino queda así abierto para que el rally bursátil de fin de año tenga lugar, con una subida potencial de hasta un 3,5 por ciento. No en vano, a priori, las semanas que quedan para terminar 2019 no podrían presentar un panorama más positivo.
El presidente Donald Trump se ha encargado de optimizar las expectativas acerca de la negociación sobre la guerra comercial entre EEUU y China. Ya no solo se espera que los nuevos aranceles estadounidenses, que iban a entrar en vigor este fin de semana, se retrasen sine die. Además, el propio Trump asegura que Pekín y Washington están a las puertas de un "gran acuerdo". Por si fuera poco, es indudable que los dos principales bancos centrales han dado buenas noticias esta semana. La Fed atribuye a EEUU unas positivas previsiones de crecimiento, lo que le permite dejar en pausa las rebajas de tipos. Por su parte, en el BCE, Christine Lagarde ha tenido un buen estreno, al asegurar que revisará a fondo el funcionamiento de la institución. En ese plan, se incluye el análisis del impacto que provoca la persistencia de los tipos de interés en niveles mínimos, un propósito que provocó un avance del 2 por ciento en la cotización de la banca europea.
La evolución de la guerra comercial invita al optimismo, pero falta por ver el efecto en el 'Brexit' de los comicios británicos
Sin duda, son argumentos de peso para el optimismo pero sería ingenuo pensar que todas las amenazas están disipadas. Hoy se conocerán los resultados de las elecciones británicas, en las que está ya descontada una victoria de los conservadores de Boris Johnson. Pero falta por ver qué consecuencias tendría para la conducción del Brexit, y para los mercados, una mayoría absoluta de los tories.
