
Hay confinamientos extraños y luego está el de Tom Cruise. La estrella de Hollywood se refugia del coronavirus en la Base, uno de los lugares sagrados de la cienciología, religión que rige su vida desde hace muchos años, situado en el complejo de Saint Hill en Sussex (Inglaterra). Por si fuera poco, durante su estancia allí se prepara para volar al espacio.
El lugar en el que reside Cruise es una de las 50 Áreas de Belleza Excepcional del Reino Unido. Tan solo los elegidos pueden vivir en la mansión por antonomasia de la cienciología. Allí también residió L. Ron Hubbard, fundador de esta polémica religión, entre 1959 y 1967.
Precisamente, coincidiendo con el aniversario de Hubbard, en 2011, la cienciología reformó completamente la vivienda y construyó un lujoso complejo anexo con cataratas, enormes jardines con más de 1,000 especies y miles de lujos más. También hay una cocina acristalada dirigida por un chef Michelín anónimo, que hace las delicias de los exclusivos residentes.
El impresionante complejo se inauguró en 2015 y, un año después, se trasladó presuntamente Tom Cruise, que reside allí de forma semipermanente desde entonces. El actor puso en venta la mansión cercana en la que vivió con su entonces mujer Katie Holmes y comenzó una nueva vida en el mismo lugar donde lo hizo el hombre que guía sus pasos. Según el medio Tatler, Tom invirtió más de 10 millones de euros para acondicionar la vivienda, dotándola de múltiples lujos.
Allí es donde Cruise se prepara ahora para su nuevo reto: volar al espacio, tal y como confirmó el administrador de la NASA, Jim Bridenstine, hace dos semanas: "Nos emociona poder trabajar con Tom Cruise en una película a bordo de la Estación Espacial Internacional", desveló. Al parecer, la película no será una nueva entrega de Misión Imposible.