Las críticas que ha recibido sobre su físico en los últimos tiempos parecen haber hecho mella en la cantante, que decidió pasar por el quirófano hace un mes para quitarse los kilos de más. También influyeron en su decisión los continuos problemas que sufría para moverse en el escenario debido a su exceso de peso, según ha desvelado el portal Page Six.
"Mariah siempre se ha sentido orgullosa de sus curvas, pero este verano, cuando terminó los conciertos en el Caesars Palace de Las Vegas y se fue de gira con Lionel Richie, notó que se le hacía más difícil bailar. Además, estaba recibiendo muchas críticas sobre su cuerpo", ha explicado una fuente del entorno de Mariah Carey al medio.
La operación, que fue realizada por un experto cirujano en Beverly Hills (California), tenía como objetivo extirpar parte del estómago de la artista para que se sienta saciada más rápidamente y consuma menos alimentos. Por fortuna, la intervención fue un éxito y Carey podrá volver pronto a los escenarios, tal y como aseguró el informante: "Mariah ya está viendo buenos resultados y se siente mucho mejor", reveló.
Con esta cirugía, Carey espera que cesen las críticas de los internautas, así como de los medios, que en algunos casos llegaron a asegurar que la cantante pesaba "119 kilos". Para ello, es consciente de que tendrá que llevar una estricta dieta y una rutina deportiva diaria.
