
Ya lo decía Mary Poppins... Con un poco de azúcar, las píldoras entran mejor. Sobre todo, las financieras. Conceptos básicos para comprender el mundo de las finanzas -nuestro mundo, después de todo- se nos siguen atragantando a los mayores. Pilar Mellado, técnico de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, acomete la triple pirueta de abrir el camino a los más pequeños con una buena dosis de azúcar: un cuento protagonizado por un elefante que sí pasaría las pruebas del informe PISA de educación financiera.
"Es importante que los 'peques' se empapen de cuentos que les trasladen a un universo de superhéroes, príncipes y princesas, piratas en busca de tesoros, animales fantásticos u objetos que cobran vida. Estas historias, además de ser divertidas para ellos, pueden acompañarse de pildoritas educativas, y ese es nuestro objetivo", explica la autora de Bapi (Aprendiendo conceptos financieros para toda la vida).
La educación financiera es una asignatura pendiente en nuestro país. El último informe PISA realizado sobre conocimientos financieros en el que se evaluó a niños de entre 13 y 15 años, sitúa a España en la décima posición de los 15 países de la OCDE analizados. Pese a contar con una de las jornadas escolares más largas, España dedica un número de horas muy inferior a los contenidos financieros en comparación con otros países, como Reino Unido o Suecia, que encabezan el ránking en esta formación.
Consciente de este talón de Aquiles typical spanish, Pilar Mellado, experta en navegar entre las turbulencias de los mercados financieros y comprometida con la educación financiera para todos los grupos sociales a través del programa voluntario Finanzas para Todos, ha escrito e ilustrado el cuento Bapi, con el que se atreve a dirigirse a niños entre 4 y 10 años para hablarles de finanzas.
El elefante protagonista, acompañado por un grupo de divertidos animales, introducirá a los menores en conceptos como banco, ahorro, gasto, deuda desde una perspectiva de diversión. La actividad, que implica a toda la familia -la autora recomienda la lectura en voz alta junto a los padres-, abre una ventana para que los niños eviten un futuro rechazo -o atragantamiento- hacia una materia que envolvemos con frecuencia en prejuicios.

"Con este cuento, nuestros niños aprenderán algunos términos financieros básicos, que les ayudarán a valorar lo que tienen, distinguir entre lo necesario y lo deseado, tomar a futuro buenas decisiones en sus mini economías, y ¡muchas cosas más!", asegura Mellado.
La autora no parece temer los retos faraónicos. Pero como también nos recuerda Mary Poppins, "todo es posible, incluso lo imposible".