Kanye West no ha dejado a nadie indiferente tras su actuación en el festival de Glastonbury del sábado pasado. El rapero sorprendió a los asistentes, y al resto del mundo, con una versión de Bohemian Rhapsody, uno de los temas más conocidos de Queen.
Su presencia ya crispaba a la gran mayoría de los asistentes del festival, que incluso habían recogido firmas para que se cancelase su actuación.
No contento con eso, Kanye West quiso hacer historia, pero sólo se quedó en un intento. Su versión de Bohemian Rhapsody no gustó y mucho menos su declaración posterior: "¡Estáis viendo a la mayor estrella del rock viva del planeta!".
Kanye West ha logrado que su actuación sea la más comentada de esta edición de Glastonbury.
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