
Portugal siempre ha sido un destino vacacional para los españoles pero desde hace unos años algunas de sus playas se han convertido en el lugar de moda.
Proximidad, paisajes, clima, estilo de vida y un sinfín de ventajas y atractivos hacen que viajar a Portugal en coche sea algo cada vez más habitual para los españoles. No hay que hacer ningún trámite especial, tan solo tener en regla y al día de pago el seguro y la ITV de nuestro coche. Los límites de velocidad son los mismos, 50 km/h en ciudad, 90 km/h en carreteras secundarias y 120 km/h en autopistas. El límite de alcoholemia también es idéntico al de España, 0,25 mg/l en aire espirado o 0,5 g/l en sangre, por lo que no tendremos que adaptarnos a ninguna normativa especial.

Por supuesto, también tendremos que llevar nuestro permiso de conducir en vigor y el uso del cinturón y los sistemas de retención infantil tienen la misma normativa que España, lo mismo que sucede con la carga y los remolques o caravanas. Allí no se utilizan todavía las balizas de señalización de avería, por lo que los triángulos son obligatorios, además de los chalecos reflectantes, en caso de que tengamos que detenernos en la carretera.
Peajes, la diferencia con España
En Portugal existen los peajes tradicionales con barrera en los que se puede pagar de manera telemática o en la propia estación de peaje pero desde hace años también se paga por circular por la mayoría de autopistas y autovías de manera telemática, sin barreras ni estaciones de peaje. Una serie de arcos o pórticos situados cada cierto kilometraje leen la matrícula y cargan el importe correspondiente. Un pago que en España hemos conseguido evitar desde hace tiempo pero que cada vez está más cerca.

Para evitar recibir las multas por no pagar esos peajes cuando cruzamos la frontera y pasamos por cada uno de esos controles de peaje telemáticos, es importante llevar preparado un método de pago asociado a la matrícula de nuestro coche. Las posibilidades de circular por Portugal si no tenemos un dispositivo electrónico (el telepeaje colocado en el parabrisas) son dos:
Easytoll: tiene un coste de contratación de 0,74 euros, es el más sencillo de todos y asocia la matrícula a una tarjeta bancaria. Se puede activar online y en los cuatro pasos fronterizos en los que existen estaciones Easytoll: A28 - Viana do Castelo, A24 - a 3,5 km de la frontera por Chaves/Verín, A25- Área de servicio de Alto de Leomil (Vilar Formoso) y A22 –-Vila Real de Santo Antonio. Tiene una validez de 30 días.
Tollcard: son unas tarjetas prepago que se adquieren en tiendas, en oficinas de Correos de Portugal o por internet. El coste de contratación es de 1 euro y la tarjeta se puede cargar con 5, 10, 20 o 40 euros. Su validez es de un año desde su activación.

Si tenemos un dispositivo de telepeaje español, como los Via-T o Bip&Drive, seguro que será compatible con el pago en Portugal, aunque es conveniente asegurarse. Si queremos adquirir un dispositivo portugués tenemos el Vía Verde, equivalente a los dos mencionados anteriormente. Se puede adquirir en la web de la empresa y también se coloca en el parabrisas o cerca de él. En caso de que no hayamos contratado alguno de estos servicios y tengamos una multa, podemos realizar el pago del peaje hasta 24 horas después de haber pasado por él. Las multas y la forma para pagarlas se pueden consultar en la web Portugaltolls.