La tecnológica valenciana Edinn Global apostó en 2004 por la digitalización de la industria y desde entonces la automoción se ha convertido en uno de sus principales clientes junto a grandes firmas alimentarias y farmacéuticos. Ahora con tres empresas proveedoras de automoción ha puesto ruedas a un asistente virtual de Inteligencia Artificial que mejora el rendimiento de la actividad industrial.
"En 2021, antes del boom en 2023 con Chat GPT, vimos que la Inteligencia Artificial lo iba a cambiar todo", explica su director general, David Tronchoni. La empresa ya había desarrollado redes neuronales para la detección previa de averías y hace tres años optó por crear una startup, Anaimo, con dos socios con experiencia académicas en este campo.
Fruto de su experiencia ha desarrollado un proyecto para testar la aplicación esa tecnología en este sector y su viabilidad, en el que han colaborado las empresas Alfilpack, Adler-Pelzer y Ceoli, un Centro Especial de Empleo. Las compañías aportaron la información y los datos de su actividad para que el asistente realizara sus diagnósticos y recomendaciones. "Los test validaron el 95%", señala Tronchoni, que explica que este desarrollo detectó problemas concretos en las fábricas, como el talón de Aquiles de los cambios de referencias de productos en unos de ellos y ofreció soluciones concretas.
La compañía valenciana ya ha empezado a comercializar estos asistentes de IA para empresas. "En el último mes estamos vendiendo un asistente virtual a la semana, nos va a costar atender la demanda en el futuro", apunta Tronchoni, que asegura que será algo general.
Reconocimiento del sector
Este trabajo le ha hecho merecedor del premio de Innovación y Excelencia empresarial PYME del clúster de la automoción valenciana Avia. "El automóvil es el sector en que tenemos más clientes", explica Tronchoni, que lo atribuye a que se trata de un sector que ha sido pionero en la mejora continua y la digitalización. Además, el hecho de que España sea uno de los mayores fabricantes de Europa también contribuye.
En el caso de Edinn, esa vinculación viene desde su nacimiento. Tras dos años de director en una fábrica de muebles, Tronchoni, informático de formación, decidió dar el salto ante el largo camino de mejora que veía en la industria. Así, junto a socio que había trabajado en Ford, formó Edinn en 2004, que ha creado su propio software para la industria con soluciones de Industria 4.0.
Tronchoni se muestra convencido del salto que supondrá la IA en todos los ámbitos. También valora una de las cuestiones que más inquietan sobre su generalización: el impacto en los empleos. "En tres años, cuando las IA sean mucho más potentes es posible que haya un ajuste temporal en ciertos puestos de trabajo. Pero a largo plazo como ha pasado en las revoluciones industriales luego esa gente afectada por el desajuste temporal se recolocará. Al final los países más industrializados y más automatizados son los que menos paro tienen. No veo que sea un problema, lo que sí será es un reto".