
Sea en el día a día o en un largo viaje, las mascotas siempre deben ir sujetas dentro del coche con el arnés correspondiente. Es por seguridad pero también porque lo obliga la ley. ¿Y tú cómo la llevas? Aquí tienes algunos consejos para hacerlo correctamente.
Tienes que saber que recae sobre el conductor toda la responsabilidad sobre la adecuada colocación de los animales a bordo. Lo primero, para que vayan seguros, pero también muy importante para que no interfieran en la conducción. Si no lo haces bien, pueden multarte además del peligro que ello conlleva para la conducción.
Bajo tu responsabilidad
La mascota siempre debe ir sujeta, ya sea en el interior del habitáculo o en el maletero. Si va en el interior, debe llevar su arnés específico y con el menor recorrido posible para que en caso de maniobra brusca no se pueda mover. Si llevamos así a nuestra mascota, siempre debe hacerse en el asiento posterior para evitar que distraiga al conductor y que en caso de que se active el airbag, este no le llegue a dañar.
También se puede llevar en el maletero, siempre que este esté comunicado con el habitáculo. En este caso debes colocar una barra o malla separadora para que no pueda saltar hacia los asientos, que sería peligroso. Además, es conveniente que no vaya suelto porque puede dañarse con los movimientos del coche. Lo mejor es que viaje en una jaula o transportín y que éstos vayan convenientemente sujetos en el maletero. En el caso de que vaya en el interior, este debe ir situado en el suelo y sujeto con los asientos.
Cómo sujetar nuestra mascota
Existen varias opciones para llevar de la mejor manera a nuestra mascota a bordo del vehículo.
Arneses: El arnés es ideal para perros ya que permite sujetarlos mediante el cinturón de seguridad o los dispositivos Isofix. No utilices correas que le sujeten al collar, en caso de volantazo o frenazo brusco no le retendrán y podrán hacerle daño.
Transportín: El transportín es el medio más seguro para llevar a una mascota. También a perros grandes. Sin embargo, según el tamaño, el lugar idóneo diferirá. Si es pequeño puede ir en el habitáculo pero siempre en el suelo y detrás de los asientos delanteros. Si es grande, mejor en el maletero en posición trasversal y lo más cerca posible de los asientos.
Rejilla divisoria: La rejilla divisoria es para separar el maletero del habitáculo. Debe ir siempre bien anclada y desde el suelo del maletero al techo del coche y debe estar homologada.
Es importante el cuidado del animal cuando vayamos a hacer algún desplazamiento más largo. En ese sentido hay que llevar agua y alimentos para el animal. También hay que parar durante el trayecto para que, como los humanos, la mascota pueda hidratarse y moverse para así desentumecer los músculos. También tendrá que hacer sus necesidades.
Si nuestra mascota tiende a marearse cuando viaja en coche, habrá que consultar previamente con el veterinario para ver si se le puede administrar algún medicamento que evite esa situación de mareo o que lo adormezca.
Nunca una mascota en los brazos
Un aspecto muy importante de cara a la seguridad es que nunca se puede llevar un animal en brazos por pequeño que sea. En un frenazo brusco puede salir disparado y dañarse o dañar a los pasajeros. Esta norma es la misma que se debe observar con los bebés, el peligro es el mismo. En caso de accidente, un bebé (o una mascota) que no esté sujeto se desplazará consecuencia de la energía cinética. Y eso podría causar graves daños a los otros ocupantes del vehículo. Solo un ejemplo para demostrar este aspecto tan importante y que muchas veces no se tiene en cuenta: Por ejemplo, en caso de una colisión a 50 km/h, si la mascota pesara 10 kg tendría un peso equivalente de 350 kg.
No debemos dejar a nuestra mascota en el interior del coche durante las paradas ni siquiera a la sombra, o con las ventanillas abiertas. Un vehículo al sol en verano puede alcanzar una temperatura en su interior de 60º, lo que puede ser mortal. Y con frío, aunque menos visible, también puede tener graves consecuencias para nuestra mascota.
Además de las dos opciones de viajar en el habitáculo o en el maletero, hay una tercera alternativa: también pueden viajar en remolques adecuados para ellas cuando hay más de una o si son animales más grandes.
A la mascota hay que llevarla de forma adecuada en el vehículo para evitar que se dañe o que pueda hacer daño a los pasajeros. En el mercado puedes encontrar varios tipos de elementos para sujetarla como los arnés, rejilla divisoria y transportín, jaula…
Hasta 200 euros de multa
Según un estudio realizado por DGT, una de cada 5 mascotas que viajan en un vehículo lo hacen sin llevar ningún sistema de protección. Es más, la mitad de sus propietarios no conoce la normativa que regula el transporte de mascotas. Además, los perros sueltos en el interior del vehículo causan accidentes a motoristas y ciclistas cuando reaccionan de forma natural ladrándoles por la ventanilla.
Pero, además, según el Reglamento de Circulación, conducir con objetos o animales que interfieran la conducción es una infracción que lleva aparejada una multa que puede llegar a los 200 euros. Y un dato, muy preocupante, España es líder de abandono de mascotas y aunque es en verano cuando más perros son abandonados por sus dueños, es un probklema que se ha generalizado durante todo el año.