
El parque español de motocicletas se sitúa por encima de los cuatro millones de unidades, según los últimos datos de la DGT. Y se espera que siga creciendo en los próximos años como respuesta a la nueva movilidad.
No es nada nuevo. La Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (Anesdor) ya avisó que, pese a la incertidumbre ante el actual contexto socioeconómico y político internacional, estos vehículos tienen cada vez más aceptación en la nueva movilidad. Y es que, según una encuesta de Mapfre, el 97% de los motoristas considera que la moto es una solución para mejorar la movilidad de las ciudades. Su uso frente al coche permite disminuir los atascos.
De hecho, el 71% recomienda la motocicleta como medio de transporte urbano. Es más, el 68% de los encuestados lo justifica con razones de sostenibilidad, como una menor contaminación que los coches y el inferior gasto de combustible. Además, destacan que la moto ocupa menos espacio en el entorno urbano.
Ahora bien, un ligero porcentaje no la recomienda por seguridad. Un 47% de los motoristas señala que para mejorar su seguridad se debe formar al resto de conductores, aunque un 25% hace hincapié en la necesidad de mejorar la formación de los propios conductores de motos.
Por otro lado, un 74% considera que estos vehículos deberían estar mejor tratados con una política de incentivos y ventajas. Uno de estos incentivos es el aparcamiento, con un porcentaje del 40%, y otro el etiquetado urbano, con un 20%.
Cabe recordar que desde Anesdor defienden que la moto es la "gran olvidada" de la automoción. Es un sector que no se ha tenido en cuenta en los planes de Movilidad (PMUS), parte del mismo está excluido de las ayudas del Plan Moves y, además, no hay un Plan Renove para la moto.
A todo esto, se suma también las etiquetas de la DGT y las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). Anesdor defiende que los municipios deben hacer un tratamiento diferenciado para las motos en estas áreas, ya que "no pueden ser tratadas como coches" y piden homogeneizar criterios en las diferentes zonas ZBE para facilitar el entendimiento del usuario. El etiquetado desempeña un papel crucial en el acceso a las ZBE, lo que podría ser un obstáculo para el papel de la moto en la mejora de la movilidad urbana a corto plazo.
A este respecto, cerca del 40% de los motoristas urbanos encuestados no cuenta con etiquetas medioambientales, y un 30% carece de información al respecto. Esta falta de etiquetado puede deberse a diversos factores, incluida la falta de conciencia sobre su importancia y, en parte, a la antigüedad del parque de motos en España.
Moto eléctrica
Según los datos de Unespa, en colaboración con Anesdor y Tirea, a cierre de 2022, ya circulaban más de 100.000 motos eléctricas por España. Un tercio del total corresponde a flotas y suelen ser propiedad de compañías de mensajería, reparto a domicilio y alquiler de vehículos.
En las ciudades, de hecho, las motos eléctricas constituyen el 4,28% del parque móvil local de dos ruedas. Pese a que la electrificación está a la orden del día, las motos no están al mismo nivel de desarrollo y expansión que los vehículos. Así, alrededor de la mitad de los encuestados desconocen estos vehículos y un 15% que declaran que no les interesan.
Es más, solo un 5% muestra interés en comprar una. Los motoristas que realizan desplazamientos urbanos son los que más interés muestran, con un 6%. Los usuarios con motos de más de 500 cc son lo que muestran un mayor rechazo a las motos 'cero emisiones'.