
La automovilística estadounidense Ford ha cerrado el primer semestre del ejercicio con unos beneficios netos de 3.674 millones de dólares (3.352,8 millones de euros al cambio actual) frente a las pérdidas de 2.443 millones de dólares (2.229 millones de euros) que registró un año antes.
El director financiero de Ford, John Lawler, apuntó que la compañía tiene "amplios recursos para financiar de forma simultánea una inversión disciplinada de crecimiento", así como para devolver capital a los accionistas.
El fabricante de automoción con sede en Dearborn aumentó su beneficio operativo un 8,6% entre enero y junio de este año, hasta 4.574 millones de dólares (4.172 millones de euros). Además, el margen operativo ascendió hasta el 4,3%.
La facturación de Ford hasta junio fue de 86.428 millones de dólares (78.428 millones de euros), lo que representa un incremento del 15,75% en la comparativa con los mismos seis meses del año precedente. Las ventas de la compañía crecieron un 9% entre enero y junio, con 2.174.000 unidades comercializadas.
La compañía ha asegurado que fue la que más ventas acumuló en Estados Unidos en el primer semestre, así como en el segundo trimestre, con un crecimiento de más del 11% de las ventas netas.
El consejero delegado de Ford, Jim Farley, ha afirmado que el cambio hacia "experiencias digitales poderosas" y vehículos eléctricos "innovadores" está en marcha y "va a ser volátil", por lo que ha asegurado que si son capaces de guiar a los clientes y adaptarse al ritmo de adopción, tendrán una gran ventaja.
La multinacional estadounidense ha elevado sus previsiones de cara al cierre del año actual, por lo que espera un beneficio operativo ajustado de entre 11.000 y 12.000 millones de dólares (entre 10.037 y 10.950 millones de euros), un flujo de caja de entre 6.500 y 7.000 millones de dólares (5.930 y 6.386 millones de euros), con unos gastos de capital de entre 8.000 y 9.000 millones de dólares (7.298 y 8.211 millones de euros).