
Las previsiones apuntan a un temporal de frío y nieve en los próximos días en varias regiones españolas, y explicamos como conducir de forma segura en estas condiciones.
Cuando las temperaturas bajan y la nieve hace acto de presencia en el asfalto, la conducción se complica mucho. Lo más probable es que el coche comience a patinar, se deslice sin control o simplemente no avance al pisar el acelerador. En ese momento es cuando hay que poner las cadenas, si no contamos con neumáticos específicos de invierno en nuestro coche.
Conducir sobre nieve es una operación que requiere una pericia y una técnica especial, a la que normalmente no estamos acostumbrados. Por ello, antes de salir en unas condiciones así, convendría valorar si realmente es necesario hacerlo.
Antes de aventurarnos a la carretera en situaciones de climatología extrema hay que saber que si empieza a nevar será obligatorio instalar las cadenas si no se dispone de neumáticos de invierno o en su defecto unos 'all season'. Si circulamos sin este equipamiento, la sanción puede ser de 200 euros, además de la inmovilización inmediata del vehículo.
Igualmente es importante evaluar si nuestro coche está en perfecto estado, con el anticongelante, la batería y la iluminación a punto. Muy importante tener el sistema de limpiaparabrisas en perfecto estado y los neumáticos con la profundidad y el dibujo apropiados. Y es clave tener el depósito de combustible siempre lo más lleno posible.
Esto es vital para nuestra seguridad, porque si nos quedamos tirados en la carretera, el motor deberá poder mantenerse encendido para tener conectada la calefacción. Si el motor está apagado, el climatizador no funcionará.
Empieza a nevar
Cuando vamos por carretera y empieza a nevar, la primera regla es aminorar la velocidad y aumentar la distancia de seguridad. En estas condiciones, se pierden tanto adherencia como visibilidad. Hay que conducir con precaución y evitar movimientos bruscos con el acelerador, el volante y el freno. Es muy importante conducir por la derecha para dejar el carril izquierdo libre y facilitar así el paso de los servicios de emergencia y equipos quitanieves.
Para instalar las cadenas hay que buscar un lugar seguro, bien separado de la carretera pero lo antes posible para evitar rodar en estas condiciones sin los neumáticos apropiados. Si no se tiene práctica de usar cadenas, lo ideal es antes de salir, practicar cómo se quitan y se ponen.
Si tenemos que ponernos en marcha y aún no hemos puesto las cadenas es mejor hacerlo en segunda velocidad en un coche con cambio manual ya que la primera tiene demasiada fuerza y el coche patinará y no se desplazará. En los coches modernos muchas veces hay un modo de conducción específico para nieve que se debe seleccionar.
Placa de hielo
Ante una placa de hielo, hay que reducir la velocidad lo más posible y utilizar el freno motor. Si al llegar a la placa pisamos el freno, perderemos el control del vehículo. Si hay marcas de neumáticos de otros vehículos es mejor evitarlas ya que sobre ellas se habrán formado placas de hielo.
En los establecimientos especializados hay distintos tipos de cadenas para elegir. Las hay metálicas, con un gran agarre en nieve y hielo. Son las cadenas de toda la vida, pero suelen ser más complicadas de instalar. Los expertos aconsejan ensayar previamente su instalación en un lugar seco, esa experiencia te será útil al instalarlas en la carretera nevada y con mucho frio.
Conducir con cadenas
A la hora de conducir con cadenas, no se deberían superar los 50 km/h. Haz maniobras suaves, utiliza marchas largas, y mucha precaución. El uso de cadenas influirá en el comportamiento del vehículo y también pueden afectar al correcto funcionamiento del ABS, del ESP y de las suspensiones, e incluso podrían dañar los neumáticos.
Hay otro tipo de cadenas más fáciles de instalar, las textiles. Además, el comportamiento del vehículo es algo mejor que con las metálicas y no dañan los sistemas de seguridad ni las suspensiones. No obstante, las textiles duran mucho menos y se deterioran rápidamente en cuando pisan asfalto sin nieve.
Otra solución son las cadenas mixtas. Son cadenas de tela pero más eficaces que las textiles simples. También duran más tiempo. Un dato que tienes que tener en cuenta antes de elegirlas es la medida de los neumáticos de tu coche. No todas las cadenas sirven para todos los neumáticos. Junto con las cadenas, guarda siempre un par de guantes apropiados, que te serán imprescindibles a la hora de colocarlas.
Antes de instalarlas, no olvides señalizar el coche, con los triángulos o con la luz de emergencia V16. Del mismo modo, usa el chaleco reflectante, además de por seguridad propia, podrían ponerte una multa de 200 euros por no hacerlo correctamente.
Ruedas motrices
Las cadenas se montan en las ruedas motrices y si tu coche dispone de tracción total los expertos recomiendan ponerlas en las cuatro ruedas. Para saber si están bien instaladas, desde Norauto recomiendan circular 100 metros para posteriormente volver a ajustarlas y en cualquier caso revisar su instalación con cierta frecuencia.
Una vez que el asfalto está limpio de nieve, debemos retirar las cadenas porque, además de estar prohibido, su uso afectará negativamente al comportamiento del coche y podría dañar suspensiones y neumáticos.
Neumáticos de invierno
Si conduces con neumáticos de invierno o los 'all season' no necesitas instalar cadenas. Esta es la gran ventaja de este tipo de ruedas. Son neumáticos homologados para rodar sobre nieve y proporcionan un alto grado de seguridad.
Como ya hemos comentado, las cadenas son difíciles de instalar y requieren más precauciones a la hora de conducir sobre suelo deslizante. Pero, por el contrario, son más baratas y complican menos la vida que tener dos juegos de neumáticos para el mismo coche.
Los neumáticos de invierno son específicos para cuando la temperatura no sube de 7 grados sobre cero y muy seguros sobre nieve y hielo. Pero no se deberían utilizar cuando el asfalto empieza a calentarse.
Por su parte, los 'all season' se comportan muy bien en todo tiempo pero, al abarcar un rango mayor de temperaturas, no son tan eficaces como los de invierno en condiciones climatológicas adversas o los convencionales cuando hace calor.