Lamborghini busca lograr en 2021 un nuevo record histórico de ventas, al superar las 8.205 unidades vendidas en 2019. Para ello cuenta con una gama de tres modelos, el Huracán, su deportivo de acceso con motor V10 y por encima el Aventador, un espectacular biplaza con motor de doce cilindros. Aunque, sin duda, la clave del éxito comercial de Lamborghini es el Urus, que representa ya el 55% de sus ventas en todo el mundo. Un fabricante que sufrió una grave crisis a finales del siglo pasado pero con su entrada en el Grupo Volkswagen no ha hecho más crecer de manera imparable.
La marca italiana es el mejor ejemplo de éxito de una compañía de éxito en el sector del automóvil, que en 15 años ha multiplicado por tres su producción hasta llegar a los más de 8.200 vehículos vendidos cada año. Y con un precio de partida por encima de los 200.000 euros por coche. Durante años ha tenido dos gamas, la de la versión pequeña, con motores V10, y la variante tope de gama con el propulsor V12. Gracias a ello, llegó a superar las 3.000 unidades anuales, cuando a principios de los años noventa esa cifra era de menos de 300 unidades cada año. Pero el salto exponencial de sus ventas ha llegado con el Urus, un todocamino espectacular, con motor V8 biturbo de 650 caballos, lanzado en 2018.
Es un modelo que ha abierto un magnífico futuro para la marca de Santa Agatha, al permitir llegar a la marca a nuevos clientes con necesidades más familiares, más para el uso diario. Un vehículo con el que poder hacer un viaje largo sin limitaciones. Esa versatilidad de uso, innegable respecto a Huracan o Aventador, ha permitido ampliar la gama de clientes de la marca. De hecho, para casi el 70% de los compradores del Urus, este es su primer modelo de Lamborghini. Y esto, importante, lo es aún más porque una vez conocido este producto es mucho más fácil que ese tipo de cliente de alto poder adquisitivo opte por un segundo Lamborghini más tradicional, más deportivo y radical.
Producción disparada
Esto también ha supuesto un problema para la marca, ya que ha tenido que ampliar notablemente su capacidad de producción. De hecho,, en 1.990 su factoría tenía una superficie instalada de 10.000 metros cuadrados, en los que se hacían pocos cientos de unidades cada año de los Diablo, Urraco o Countach. En 2015, ya plenamente integrada en el grupo Volkswagen, la cifra aumentó hasta los 80.000 m2. Y ahora, con el Urus a pleno rendimiento, esta cifra ha alcanzado los 160.000 metros cuadrados.
También el personal de la fábrica se ha duplicado en solo 10 años. Si en 2012 eran 982 empleados, en el primer semestre de 2021 esta cifraba alcanzaba los 1.908 trabajadores, y creciendo... Con todo ello, la legendaria marca Lamborghini, que entre 1990 y el año 2000 vivió un momento muy complicado, con varios cambios de propietario incluyendo el grupo Chrysler, es ahora una compañía muy solvente.
Sus ventas se han multiplicado por 8 desde 1990 y por tres desde 2015, gracias al Urus, su modelo más vendido que representará más del 55% de las ventas este año. Tras él se sitúa el Huracán, en sus diferentes variantes, que representa un 30% del total, y el Aventador, como tope de gama supone el 15% de sus ventas.
Electrificación
La gama actual de Lamborghini está basada en tres pilares, Huracan, Aventador y Urus, pero pronto llegará un sustituto para el tope de gama actual. Será un vehículo que comenzará con la electrificación en la marca de Santa Agatha, primero con un híbrido enchufable con el que empezar a rebajar sus emisiones de CO2. Este plan de electrificación le llevará, en 2027, a presentar su primer modelo 100% eléctrico, con el que Lamborghini ampliará su gama con un cuarto pilar.
La marca italiana ha previsto lanzar un plan de inversión de más de 1.500 millones de euros con el objetivo de electrificar la gama y reducir las emisiones de CO2. Deportividad no debe ir reñida con sostenibilidad y ese es el nuevo camino que ha puesto en marcha la marca más deportiva y radical del grupo Volkswagen, con el permiso de Bugatti, esta última con un enfoque más lujoso y aún más exclusivo.
Lamborghini solo fabrica sus coches una vez realizado el pedido, no tiene coches de stock que se puedan comprar inmediatamente. A cada cliente se le construye su coche hecho a medida, con sus gustos y especificaciones. Y junto al coche se le regala una maqueta, en escala 1/18, que representa exactamente su unidad de producción, con los mismos colores, el mismo acabado interior y el mismo equipamiento, hasta donde se puede ver en esta reproducción.
Desde 215.000 euros
Dentro de la familia Lamborghini, ahora mismo están a la venta el Urus, con un precio de partida de 250.000 euros y el Huracan con dos opciones de carrocería, Coupé y Spider. El punto de partida es el de propulsión trasera, con un precio de 215.000 euros y que llega hasta los 340.000 euros en el caso del STO. Este último es la versión más extrema y también con una gran demanda, ya que hay más de un año de espera para esta variante más radical.
Si hablamos de los descapotables de la gama Huracan, oscilan entre 235.000 y 275.000 euros. En cuanto al Aventador, ya no se pueden hacer pedidos del modelo tope de gama. Su producción terminará en el año 2023, pero ya están vendidas todas las unidades de la serie final. Se trata del Aventador Ultimae, una serie limitada de 350 unidades de la versión Coupé y otras 250 de la variante Spider. Su precio de partida era de 326.245 euros.
También están vendidas todas las unidades de una serie especial aniversario del legendario Countach, del que se harán 112 unidades, con un precio de partida de más de dos millones de euros cada uno. Igualmente todos fueron vendidos antes incluso de anunciar el lanzamiento del modelo. Y es lo que tiene LamborghinI, que vende todo lo que hace sin importar su precio de venta.