
El poder y la influencia de las redes sociales ha crecido tanto durante los últimos años que, en las manos adecuadas, han demostrado ser, si no el que más, uno de los altavoces más rápidos y eficaces para lanzar mensajes al mundo.
Ayer, quien para muchos es el hombre más poderoso del planeta, Donald Trump, volvió a demostrarlo una vez más. Con apenas 100 caracteres publicados en Twitter, el presidente estadounidense generó una reacción inmediata en los mercados, que terminó haciendo caer al petróleo más de un 3,5 por ciento en bolsa, tanto al Brent como al West Texas estadounidense, que en aquel momento se mantenían planos en la sesión.
"El petróleo está muy caro. OPEP, por favor, relájense y tomenselo con calma. El mundo no puede aguantar una subida de precio-frágil", es la transcripción del mensaje de Trump. El Brent europeo retrocedió hasta los 64 dólares, y el West Texas estadounidense hasta el entorno de los 55 dólares.
Trump interpeló a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), insinuando que el cártel es responsable de las últimas subidas del petróleo. Y es que la Organización se comprometió el pasado diciembre a volver a implementar el pacto de recorte de producción entre sus miembros y otros productores, como Rusia, un acuerdo que, según las cifras que ha publicado el cártel para el mes de enero, se está cumpliendo como se diseñó. En lo que va de año, el barril Brent sube un 20 por ciento y el West Texas, un 22 por ciento.
Goldman lo ve en 75 dólares
El banco estadounidense cree que el barril europeo se encamina al entorno de "los 70-75 dólares", lo que supondría un avance de más del 17 por ciento si se alcanzase la cota más alta, desde los 64 dólares en los que se movía ayer el barril. Goldman justifica esta previsión destacando, según señalan desde Bloomberg, que Arabia Saudí está recortando la producción a un ritmo más rápido del que la aumentan los productores estadounidenses de shale.
"El mercado del crudo probablemente seguirá endureciéndose de forma importante en marzo y en abril", explica el banco, quien, eso sí, avisa también de que es probable que los 70 dólares sean un precio que se toca de forma fugaz. "Si bien podría alcanzar estos precios, creemos que este contexto sería frágil", señala el banco, que tiene una estimación de 60 dólares para el barril europeo a finales de este año.
El consenso de mercado, por su parte, ve al Brent en el entorno de 70 dólares en el último trimestre de 2019, y espera que siga subiendo en 2020, ya que para mediados de ese año los expertos lo sitúan por encima de los 74 dólares.