
Aunque su parte del pastel es cada vez más grande, el peso de la gestión pasiva en Europa aún dista mucho de ser el que adquiere en Estados Unidos. Mientras allí aproximadamente el 33% de todo el dinero en fondos se encuentra en estrategias de gestión pasiva (fondos índices y ETFs), según datos de Morningstar, en Europa ese porcentaje se reduce a la mitad, al 16%. La diferencia se observa aún mejor si se compara la naturaleza de los fondos más grandes por volumen de activos en cada región: entre los diez mayores de Estados Unidos tan sólo uno se gestiona de forma activa. Un escenario muy diferente al de Europa, donde ocho de los diez mayores fondos son activos.
En Estados Unidos, el papel protagonista lo encarna Vanguard (la mayor gestora pasiva del mundo, que en 1975 lanzó el primer fondo encargado de replicar un índice, el S&P500, a bajo coste). No solo gestiona el fondo más grande al otro lado del charco, el Vanguard Total Stock Market Index Fund, con más de 671.000 millones de dólares bajo gestión según Morningstar, unos 593.000 millones de euros al cambio, sino que coloca otros cinco fondos en la lista de los mayores fondos por patrimonio en la primera economía del mundo. En esa lista es posible encontrar también otros fondos pasivos de Fidelity o iShares, entre otros.
En ese top ten solo existe un fondo activo: American Funds Growth Fund of America, cuyo patrimonio supera los 166.000 millones de dólares.
En Europa, en cambio, el predominio lo sigue teniendo la gestión activa -a pesar de que no ha dejado de arañar cuota de mercado en la última década, los activos bajo gestión en fondos índice y ETFs alcanzan los 1,3 billones de euros frente a los 6,24 billones que atesora esta industria en Estados Unidos, según datos de Morningstar, a cierre de enero-. En el Viejo Continente, solo dos de los diez mayores fondos por patrimonio se gestionan de forma pasiva: iShares Core S&P 500 ETF y Vanguard S&P 500 ETF. A diferencia de Estados Unidos, el mayor fondo es activo: Pimco GIS Income Fund, con más de 48.300 millones de euros bajo gestión.
Pero el margen que tiene la gestión pasiva para crecer en el Viejo Continente es elevado, en opinión de Moody's, que estima que alcanzará una cuota del 25% en 2025. Entre sus bondades, además de invertir asumiendo costes más bajos que mediante los fondos activos, es que "los índices sacan fuera a las empresas malas", explica Ramón Blanco, consejero fundador de Indexa Capital en el marco de un encuentro organizado por Caser. Al margen de Europa, el peso de la gestión pasiva en España aún es menor, ya que representa el 6,13% del total de fondos de inversión, según FeelCapital.