
El Ibex 35 acumula una revalorización del 5,6% en lo que va de 2019. Y todavía le queda recorrido por delante si su precio se ajustara a las expectativas de beneficio que los analistas contemplan para el selectivo. Desde Renta 4 aseguran que el Ibex 35 podría llegar a situarse sobre los 9.880 puntos, lo que implica un potencial al alza adicional del 8,5%, a lo que habría que añadir la rentabilidad por dividendo.
En conjunto, el inversor podría ganar todavía un 13,2% más respecto a los niveles actuales si se cumple el escenario base que contempla la gestora. Según sus previsiones, el beneficio por acción del Ibex 35 previsto para este ejercicio se situará a cierre de diciembre en los 790,4 euros, con un PER (número de veces que el beneficio queda recogido en el precio) de 12,5 veces.
"La rentabilidad por dividendo en Europa es el único activo que está por encima de su media de 30 años, en el 4,2%"
"Acabaríamos el año con ganancias cercanas al 20%", asegura Javier Galán, responsable de renta variable Europa de Renta 4 Gestora, en un supuesto que dejaría al selectivo nacional con una valoración todavía atractiva, ya que, asegura, "la bolsa europea sigue estando particularmente barata", sobre todo si se compara con Wall Street. "Es el primer año en el que la expectativa de crecimiento de los beneficios es mayor en Europa que en EEUU".
Y todo este contexto supone, afirma, "un buen punto de entrada". No obstante, a nivel de la gestora, Galán asegura que este mes de enero es el primero "en muchos años" en el que se están produciendo mayores reembolsos que suscripciones en los fondos de inversión que gestiona, ya que hay inversores que han aprovechado el buen comienzo de año para salir de la bolsa, aunque tampoco ha sido "una tendencia generalizada".
El atractivo del mercado
"Se ha producido una contracción de los múltiplos (derating, en jerga financiera) que ha supuesto una caída de las valoraciones por PER de los principales mercados de entre el 25% y el 30%. Esto ha dejado a Europa en valoraciones de unas 12 veces beneficios, mientras las ganancias siguen creciendo a un ritmo de entre el 5% y el 10%", apunta David Cabeza, gestor de renta variable de Renta 4 Gestora.
"Prescindimos de bancos, eléctricas y 'telecos' en España para 2019"
En su opinión, la fuerte "contracción" que se ha producido se justifica porque "el mercado ha incorporado una prima de riesgo, a raíz de una posible recesión o de riesgos políticos" que no se están realmente produciendo.
Ahora bien, Galán reconoce que "quizás" las estimaciones que maneja el consenso de analistas estén siendo "demasiado optimistas" al no "recoger los riesgos que sí están cotizando en mercado", que, en ningún caso, provocarían una corrección importante del mercado, ya que descartan el riesgo de una recesión en 2019.
Eso sí, hay dos zonas geográficas donde no invierten en este momento: Reino Unido e Italia. "No estamos en firmas que dependen solo de vender en Reino Unido. Y, aunque el acuerdo para el Brexit me parece muy bueno, de momento preferimos no estar, aunque luego esas compañías puedan llegar a subir mucho en bolsa", dice Galán.
En máximos del dividendo
Una de las consecuencias de la abultada caída de los mercados en los dos últimos meses de 2018 es que la renta variable europea presenta la mayor rentabilidad por dividendo de su media histórica y es, de hecho, el único activo de inversión, que se sitúa por encima de las rentas que tradicionalmente ha generado por el inversor. Según la gestora, el retorno de los pagos de las firmas cotizadas europeas se coloca en el 4,2%, por encima del 3,8% histórico.
"El desapalancamiento financiero que han venido realizando las compañías en los últimos años genera recursos que o bien se destinan a retribuir a los accionistas, o a ampliar su negocio (capex) como alternativa. Lo cierto es que el payout (porcentaje sobre el beneficio que representa el dividendo de una compañía) es superior al de los últimos tres años en Europa", asegura Cabeza.
Sin embargo, no sucede lo mismo en Wall Street donde el dividendo de las compañías está por debajo del 2,1% que ha generado el dividendo en los últimos 30 años. En la misma situación se encuentra la rentabilidad de los bonos, tanto gubernamentales como corporativos, o el retorno que ofrece la liquidez.
Valores españoles
Dentro del fondo Renta 4 Bolsa, centrado en la renta variable española, Galán reconoce que han decidido prescindir en 2019 "de bancos, eléctricas y firmas de telecomunicaciones". En su opinión, aunque los bancos cotizan a múltiplos "muy bajos", la incertidumbre del sector les hace sentirse "incómodos" invirtiendo en él. Tienen una leve exposición a Bankinter y a Banco Santander, no obstante.
Sobre las utilities nacionales, "el problema que tienen es que cotizan a 14 ó 15 veces beneficio cuando el crecimiento que registran es reducido o quienes crecen, se debe más a su exposición a países emergentes por lo que ese mayor beneficio lo absorbe la depreciación de la divisa. No tienen tampoco ninguna ventaja competitiva frente al resto del sector a la hora de contratar sus servicios (es igual contratar la luz con Iberdrola, REE o, incluso, Repsol que también está ofreciendo estos servicios)", reconocen desde la gestora.
Dicho lo cual en Renta 4 Bolsa mantienen una posición en Iberdrola con un 3% de peso en la cartera, frente al 4% anterior, y un 2% en REE, frente al 3% anterior. "Hemos aprovechado las últimas subidas para vender y reducir exposición", en sintonía, aseguran, con "la mayor parte de los gestores nacionales" que han optado por mantenerse al margen de este sector.
El fondo cuenta con un 60% invertido en industriales, infraestructuras, consumo cíclico y materiales básicos. Sus principales posiciones son, de hecho, Ferrovial, Inditex, Viscofan, CAF, Airbus, Repsol, Applus, Grifols, Indra e Iberdrola.