Introduce mejoras en relación con la eficiencia energética de los edificios y supondrá un coste adicional del 1% sobre el precio total
MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
El Consejo de Ministros aprobó hoy el Código Técnico de la Edificación (CTE) que supone una actualización de la normativa del sector de la construcción, en la que introduce una serie de medidas para mejorar la sostenibilidad medioambiental, habitabilidad y seguridad de los edificios.
Según explicó la ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, en conferencia de prensa, el CTE representa la renovación de una normativa preconstitucional que tenía más de 30 años de antigüedad y la unificación de reglamentos que suman más de 9.000 páginas en diez documentos.
Asimismo, la norma permite al Gobierno trasladar las últimas directivas comunitarias en materia de construcción y habitabilidad al ordenamiento jurídico español y acercará a España a los compromisos con el Protocolo de Kioto, ya que incluye importantes mejoras en materia de ahorro energético y reducción de emisiones a la atmósfera.
En relación con el coste de la aplicación del Código, Trujillo incidió en que las mejoras de esta normativa supondrán un recargo del 1% del importe total de la vivienda, que será compensando en los primeros cinco años de vida del inmueble gracias al ahorro que permitirá la eficiencia energética.
En este sentido, la ministra de Vivienda opinó que las consecuencias de la aplicación de la nueva normativa a las actividades del sector de la construcción serán positivas, ya que supondrá más puestos de trabajo y más cualificados. Asimismo, fomentará la productividad del sector, puesto que las empresas constructoras se verán obligadas a invertir en innovación para incorporar los requisitos del CTE.
La responsable de Vivienda matizó que el CTE tiene un carácter "prestacional", en referencia a que el documento establece las prestaciones que debe cumplir el edificio y no rige los métodos a través de los que se deben cumplir estas exigencias. Además, se compone de dos partes: los documentos reconocidos, que recoge el ámbito de aplicación de la normativa, y los documentos básicos, que incluyen las normas que deben cumplir.
El Consejo de Ministros decidió hoy también crear el Consejo para la Sostenibilidad, Innovación y Calidad de la Edificación (CSICE), que permitirá realizar un seguimiento de la aplicación del Código Técnico. Además, se encargará de su actualización periódica, ya que, como aseguró la ministra, el CTE es un código "vivo", que irá modificándose periódicamente para incorporar las innovaciones del sector de la construcción.
Estas actualizaciones se harán públicas en el Registro General del Código Técnico de la Edificación, un organismo adscrito a la Dirección General de Arquitectura y Política de Vivienda y que también fue creado hoy por el Consejo de Ministros.
AHORRO DE ENERGÍA.
Trujillo subrayó los avances en materia de eficiencia energética y explicó que el CTE contiene cuatro exigencias básicas, que son la limitación de la demanda energética a través del aislamiento, la eficiencia energética de las instalaciones de iluminación, la obligación de que entre un 30% y 70% del agua caliente consumida haya sido calentada a través de energía solar y el establecimiento de una contribución fotovoltaica mínima al consumo de energía eléctrica.
Entre las principales novedades del Código, además de las innovaciones en materia de ahorro energético, se encuentran las nuevas exigencias de seguridad en relación con materiales, cimientos y estructura, así como la obligación de elaborar un estudio técnico sobre el proyecto.
SEGURIDAD CONTRA INCENDIOS, AVALANCHAS Y HUMEDAD.
También incorpora nuevas medidas de seguridad en relación con la prevención de incendios, la acumulación de humos, sistemas automáticos de apagado de incendios y nuevas exigencias de seguridad para los edificios de más de 80 metros de altura, que no existían en los reglamentos anteriores.
Otra novedad son las normas para la construcción de pabellones y complejos deportivos con el objetivo de evitar avalanchas, la mejora de la iluminación, la protección de los edificios frente a rayos, la recogida de basuras puerta a puerta, la exigencia de instalar contadores de agua individuales y la regulación de la emisión de gases.
Por último, el CTE incluye otra serie de normas que pretenden mejorar la salubridad de los edificios y disminuir el número de problemas de patología por humedad debido al mal diseño constructivo y mantenimiento de suelos, muros enterrados, fachadas y cubiertas.