
A solo unos días de que se celebren las elecciones en Alemania, los mercados están tranquilos. Aunque la ventaja de Merkel sobre Martin Schulz, líder del SPD -el partido social demócrata alemán-, se ha estrechado ligeramente en las encuestas, todo apunta a que la actual canciller se proclamará vencedora en los comicios que se celebrarán este domingo.
La principal preocupación del mercado es el ascenso que ha registrado en las encuestas el partido ultraderechista AfD, que en los últimos meses prácticamente ha doblado su apoyo, hasta acercarse al 11%. Aún así, los populistas quedan lejos de tener opciones de ganar los comicios
Con estos ingredientes, los analistas esperan que -si todo va según lo previsto- la reacción del mercado sea tímida y que las consecuencias se dejen sentir más en el largo plazo. "En el medio y largo plazo, una coalición entre CDU y CSU [el partido de Angela Merkel y los democristianos] podría influenciar el euro y a la renta variable y fija de la eurozona dada las implicaciones que tendría para la velocidad del proceso de integración europeo", explican desde UBS.
Toda vez que las probabilidades de que Merkel se mantenga en su posición son altísimas, la clave estará en el partido en el que se apoye para formar gobierno. Hace solo unas semanas los democristianos parecían la única opción, pero ahora también está sobre la mesa la posibilidad de una gran coalición con el partido socialista. O incluso una unión con los verdes o los liberales (FDP).
"Los potenciales compañeros de gobierno, podrían pedir el puesto de ministro de Finanzas del país. Si Wolfgang Schäuble abandona el ministerio, podría llegar uno más duro (FDP) o uno más suave (SPD o los verdes) lo que afectaría a la periferia europea", reflexionan en la entidad helvética.
La renta fija
En este sentido, desde UBS recuerdan que la visión de los liberales con respecto a Grecia y otras economías más débiles "es más dura". "Una coalición con el FDP beneficiaría moderadamente a los bonos con respecto a la periferia", inciden. Mientras, si Merkel se gira a la izquierda para formar su gabinete, "justificaría un aumento de las rentabilidades, debido a un probable expansión fiscal y un aumento de las emisiones de bonos".
La segunda derivada en el mercado de renta fija tiene que ver más con el largo plazo. Si figuras como Wolfgang Schäuble o Jens Weidmann, presidente del Bundesbank, se quedan sin protagonismo, podrían llegar a ocupar cargos importantes dentro de la UE o el BCE, lo que "probablemente pesaría en el corto plazo en las primas de riesgo de los periféricos".
Sin embargo, en UBS consideran que más a largo plazo sus políticas podrían llegar a tener una influencia positiva. "Su visión más estricta con respecto a la consolidación fiscal, podría ser con el tiempo beneficiosa para la calidad del crédito de los periféricos, lo que sostendría las rentabilidades de la deuda", señalan desde la casa de análisis.
La renta variable
En el caso de la renta variable alemana, las elecciones en el país tienen una influencia menor de la que pueda tener en otros de la eurozona, ya que solo el 30% de su facturación es interna. Y la solidez de los resultados empresariales en Europa y la mejora en las expectativas de crecimiento hacen que la bolsa de la región pueda estar tranquila ante los comicios.
"Las elecciones y sus implicaciones en las futuras políticas del BCE y en la postura de Alemania con respecto a la integración y la periferia serán un catalizador en el medio y largo plazo. Es improbable que el impacto sea significativo en el corto, sea cuál sea la coalición que se forme", inciden en UBS.
Por su parte, en Columbia Threadneedle ven cinco motivos para que una victoria de Merkel pueda impulsar a los mercados de renta variable. Así, creen que restaurará la confianza política y será un paso para alejarse del populismo. Asimismo, consideran que la bolsa se apoyará en la mejora de las ordenes manufactureras y de los beneficios y en unas valoraciones atractivas en términos relativos.
¿Qué pasa con el euro?
Uno de los principales temas del mercado durante los últimos meses ha sido la fortaleza del euro y la debilidad el dólar. Alemania no es uno de los países más afectados por la subida de la divisa común -ya que sus exportaciones generan más valor añadido y tienen pocos competidores- y no parece que una coalición vaya a suponer un riesgo a corto plazo para la moneda.
"Alemania siempre ha sido un factor estabilizador del euro y parece difícil que eso vaya a cambiar con estas elecciones", indican en UBS. Sin embargo, la gran cuestión tendrá que ver con la sucesión de Draghi en octubre dentro de dos años. "Las perspectivas del euro pueden mejorar si Alemania se hace con la presidencia del BCE, por lo que los inversores deben monitorizar el futuro del ministerio de Finanzas germano y sus implicaciones para los altos cargos de la región", finalizan desde la entidad.