
Seleccionamos aquellos que han sido capaces de crear valor en los últimos años y que, además, poseen un 'rating' de al menos 4 estrellas Morningstar.
Hallar soluciones en renta fija se antoja complicado y más después de que esta semana se pusiera sobre la mesa la posibilidad de empezar a retirar los estímulos en Europa (los mismos que hasta ahora han sustentado el rally de la deuda pública). A corto plazo apenas queda valor: la mayoría de referencias ofrece retornos cercanos a cero o negativos. Y a largo debe tenerse en cuenta el riesgo de duración, sobre todo después del repunte de la inflación. A priori podría parecer que la partida está perdida; sin embargo -y aunque rentabilidades pasadas no garantizan rentabilidades futuras- existen gestores que en los últimos años han demostrado su capacidad para generar alfa (el equivalente a valor en la renta variable). Seleccionamos sus productos -la mayoría aptos para todos los bolsillos-, en base a cómo se han comportado a largo plazo y al rating otorgado por Morningstar, de al menos cuatro estrellas.
'CS European Sovereign Plus Bond'
Es el único abanderado con un rating Morningstar de cinco estrellas, la máxima calificación. Y no es para menos. Este fondo de Crédit Suisse ha ofrecido al inversor un retorno anual de casi el 9 por ciento durante los últimos cinco años, según los datos de Morningstar, aventajando en más de cuatro puntos porcentuales al resto de su categoría (renta fija gubernamental). Un buen hacer que se extiende también a 2016, en el que acumula una rentabilidad algo superior al 5 por ciento gracias a su fuerte apuesta por deuda pública española e italiana (con los bonos de ambas se ha ganado un 7 y un 1,7 por ciento en el año, respectivamente). Y es que, tal y como reza su folleto, "el fondo invierte principalmente en bonos emitidos por instituciones estatales europeas con condiciones macroeconómicas más débiles". Soporta, además, unos costes bastante moderados en comparación con sus homólogos: a pesar de que tiene una comisión de entrada del 3 por ciento, los gastos de gestión anual bajan hasta el 0,7 por ciento.
'NN (L) Belgian Government Bond P Cap'
Su nombre lo dice todo: solo invierte en deuda pública belga, un estilo de inversión que Morningstar, eso sí, estipula de un riesgo elevado, teniendo en cuenta que no diversifica nada su cartera (y apenas cuenta con un 1,5 por ciento en efectivo). Así ha conseguido un rendimiento anualizado del 6,8 por ciento en los últimos cinco ejercicios, dos puntos más que la media de su clase. Y en 2016, además, es el producto más rentable con un rating de cuatro estrellas, solo un escalón por debajo de la excelencia, al subir un 7,98 por ciento. Aunque, según estos datos, no tiene inversión mínima, soporta un coste de entrada del 3 por ciento del total. Y en este caso, los gastos de gestión son aún más bajos que en el anterior, del 0,65 por ciento.
'Amundi Fds Bd Euro Government FE-C'
Este fondo, gestionado por Isabelle Vic-Philippe en Amundi desde 2014, invierte principalmente en bonos denominados en euros. Desde su creación, en 2012, acumula una rentabilidad anualizada del 6,6 por ciento, aportando un punto y medio más que los fondos de su categoría en el mismo plazo. Un riguroso proceso que se basa en un análisis de la duración, la curva de rendimiento y la selección de los bonos. La mayoría de las posiciones son a medio y largo plazo (entre 3 y 7 años) y las que más pesan en su cartera están emitidas por países como Italia, España (a la que incrementó su exposición en verano), Países Bajos o Alemania. El buen hacer de Vic-Philippe, que se cifra este año en ganancias del 4,05 por ciento, le vale a la publicación británica Citywire una calificación de ?+? (el cuarto escalón), si bien ésta solo puntúa a aquellos que rozan la excelencia en su gestión.
'Fon Fineco Interés A'
Entre los mejores productos, es el único de una gestora española, Kutxabank Banca Privada. Invierte al menos el 90 por ciento de su patrimonio en deuda emitida por la Comunidad Autónoma Vasca, Diputaciones Forales o Entidades Locales Territoriales del País Vasco. Y sus activos en cartera tienen un vencimiento medio en torno a 2019 (tres o cuatro años la mayoría). Una estrategia que, si bien puede ser algo arriesgada por su nula diversificación, ha cosechado frutos a largo plazo: ha dado una rentabilidad anual del 7,75 por ciento en los últimos cinco ejercicios, tres puntos por encima de la categoría, y gana un 2,75 por ciento en lo que va de año, según los datos de Morningstar. Un comportamiento que le vale cuatro estrellas Morningstar entre cinco. La inversión mínima para acceder a este producto es una participación, que equivalen a unos 13 euros según su último valor liquidativo, más una comisión del 5 por ciento de entrada. En gestión, cobra unos gastos del 0,5 por ciento al año.
'Epsilon Fund Euro Bond R'
Es el segundo fondo más exigente de la selección, ya que exige al inversor una cantidad mínima de 500 euros según los datos de Morningstar (el más caro es Vanguard EUR Gov Bond Index Inv). Eso sí, los resultados de Paolo Bernardelli, que lleva al frente de este producto desde el año 2007 y es el responsable de renta fija y divisas en Eurizon Capital (tiene un rating "+" para Citywire), se observan a largo plazo: ha ofrecido un retorno del 6,8 por ciento anual durante los últimos cinco ejercicios, un buen hacer que, por otra parte, también se extiende a 2016, en el que gana un 4,27 por ciento. Invierte, principalmente, en instrumentos de cualquier tipo relacionados con la renta fija, denominados en euros, con una calificación crediticia igual o superior a BBB- en la clasificación de Standard and Poor?s o Baa3 en la clasificación que establece Moody?s, esto es, justo un escalón por encima del bono basura.
'Natixis Souverains Euro'
Este fondo está gestionado por Olivier de Larouzière, que cuenta con 22 años de experiencia, desde diciembre de 2007. "Creemos que sigue siendo una opción atractiva para invertir en bonos gubernamentales de la zona euro", explica Mara Dobrescu, CFA, en un informe de Morningstar. Como explica la experta, la clave de este producto es que trata de aportar valor mediante cuatro palancas: gestionando la duración, el posicionamiento en la curva (que es lo que le aporta la mayor parte del rendimiento desde 2008), la selección del país y la diversificación de los bonos. "Por ejemplo, Larouzière compró deuda griega a corto plazo con gran descuento en medio de la crisis de la eurozona de 2011, que dio sus frutos ya que fueron reembolsados a la par permitiendo al fondo superar al 88 por ciento de sus competidores ese año", describe. A día de hoy, la deuda pública francesa e italiana ocupan las primeras posiciones de su cartera, según datos de Morningstar.
'Petercam Bonds Eur Inv Grade B'
Otra alternativa para tener exposición a la deuda pública asegurándose una gestión activa es este fondo de Degroof Petercam AM, creado en 2010 y gestionado por Sam Vereecke desde 2011 (desde enero de este año cuenta con la ayuda de Ronald Van Steenweghen). En su cartera figuran bonos con vencimientos cortos, medios y largos; de países como España, Italia o Francia con cupones aún atractivos. Sin embargo, su éxito no se debe únicamente al buen hacer de la deuda en el último año ya que logra un retorno anualizado del 6,5 por ciento desde 2011 que le ha servido, entre otras cosas, para tener una nota de cuatro sobre cinco por parte de Morningstar.
'Vanguard EUR Gov Bond Index Inv'
La propuesta de Vanguard difiere de las demás en que permite tener exposición a la deuda pública, pero de una manera pasiva. Más que nada, porque replica a un índice y su objetivo es obtener rendimientos similares pero a menor coste. Con el, "los inversores ganarán exposición tanto al núcleo como a los países de la periferia", siempre mediante bonos con grado de inversión, explica José G. Zárate, analista de Morningnstar. Además cuenta con un analyst rating por parte de la entidad (el que mide, entre otras cosas, qué productos lo harán mejor que el resto a largo plazo en términos de rentabilidad-riesgo con mayor probabilidad) de plata, siendo oro el máximo. Eso sí, solo es apto para los bolsillos más pudientes: está disponible a partir de los 100.000 euros.
'Pioneer SF Euro Cv 7-10 year F'
Este fondo vio la luz en 2005 y desde entonces no ha dejado de cosechar ganancias. Invierte al menos dos tercios de su patrimonio en deuda pública en euros cuya vida residual es de entre 7 y 10 años -la duración de la inversión en ningún caso será inferior a 4 años-. Está gestionado por Tanguy Le Saout, jefe de renta fija de Pioneer, y Cosimo Marasciulo, presente en la gestora desde hace 16 años. Su primera posición es una emisión de deuda francesa con cupón del 1,75 por ciento (representa el 13,5 por ciento de su cartera) y la segunda, de Alemania al 1,5 por ciento. Está disponible a partir de los 1.000 euros.
'AXA WF Euro Government Bonds'
Sigue una filosofía similar a los anteriores (compra deuda pública en euros) y cuenta con diez años de bagaje a sus espaldas -siempre con el mismo equipo gestor-. El 59,27 por ciento de los bonos de su cartera tienen una calificación crediticia de BBB y solo un 1,31 por ciento sin calificación, según Morningstar y se caracteriza por tener los vencimientos muy repartidos, aunque el grueso (22 por ciento) se concrentra en el plazo de 7 a 10 años. Por países, además, la deuda de España e Italia ocupan un lugar significativo en este fondo: sus diez mayores posiciones pertenecen a ambas regiones. "La valoración atractiva de los periféricos en comparación con la de los países centrales nos anima a mantener la sobreexposición en los plazos cortos de estos países", señala el equipo gestor en su último informe, a cierre de agosto.