
La sabiduría popular recoge que después de la tormenta llega la calma. Un axioma que en el caso de Volkswagen parece que se va a cumplir. El fabricante alemán salió de pérdidas en el primer trimestre del presente ejercicio y el consenso de mercado ya estima que en 2017 recuperará el trono de los beneficios del sector europeo.
La automovilística que comercializa las marcas Volkswagen, Aurdi, Sköda o Porsche lanza un mensaje de fortaleza y demuestra que está más cerca el momento en el que se pueda dar por superado el escándalo de las emisiones de sus motores diésel. Los analistas prevén que el próximo año ganará 10.300 millones de euros, todavía un 4% menos que en 2014, el ejercicio previo al estallido de una de las mayores crisis de su historia, pero, de nuevo, por encima de su principal competidor en Europa, Daimler (DAI.XE), el fabricante de Mercedes-Benz y Smart.
La primera piedra para recuperar su estatus dentro del sector la puso en los primeros tres meses del presente ejercicio. Volkswagen (VOW3.XE) ganó entre enero y marzo 2.362 millones de euros, un 19% menos que en el mismo periodo del año anterior. Una cifra con la que el presidente de la junta directiva del grupo, Matthias Müller, se mostró satisfecho ante "los numerosos retos que afronta la compañía, como los costes de la manipulación de emisiones contaminantes, la digitalización y la movilidad eléctrica".
"Dados los numerosos desafíos que tenemos, estamos contentos con el comienzo de 2016, que sin duda será muy exigente", dijo Matthias Müller. Las estimaciones de los expertos adelantan que Volkswagen cerrará el año registrando unas ganancias de 8.461 millones de euros, todavía por debajo de los 8.761 millones hasta los que se espera que se eleve el beneficio neto de Daimler.
'Sorpasso' por capitalización
El sorpasso por beneficios en el sector no se producirá hasta 2017, según las estimaciones, pero por capitalización ya sucedió a principios de mayo. El rebote que protagoniza Volkswagen en bolsa desde los mínimos hasta los que se hundieron sus acciones en octubre ha restituido al grupo como la automovilística europea más capitalizada y como la segunda en el mundo, solo superada por Toyota.
Los títulos del fabricante repuntan cerca de un 50% desde los 92 euros en los que encontraron suelo tras hacerse público el escándalo de los motores diésel, hasta los 136 euros. Una escalada que aunque aún la mantiene lejos de los más de 255 euros a los que llegaron a cotizar, ha sido suficiente para batir a Daimler, que cae un 20% en 2016.
Volkswagen capitaliza ahora 69.000 millones de euros frente a los 66.000 millones que lo hace su rival alemán. Eso sí, el primer grupo ha agotado su potencial alcista, mientras que, según la valoración media del consenso de mercado, Daimler cuenta con un potencial alcista del 25%.